Página de inicio » Quote » Francisco de Quevedo » „Hombre mal persuadido de la elocuencia de tus vicios, no eches la culpa de tu error a tu muerte, sino a tu vida. No quieres inmortalidad porque lo dudas, sino porque la temes. Vives como bestia porque no rehúsas de merecer los castigos eternos; y por no padecerlos no admites la eternidad, como si esto excluyera la inmortalidad de tu alma. Engañaste como los necios que dicen que todo es vida hasta la muerte, y lo que llamas muerte su último y menor instante.“
„Hombre mal persuadido de la elocuencia de tus vicios, no eches la culpa de tu error a tu muerte, sino a tu vida. No quieres inmortalidad porque lo dudas, sino porque la temes. Vives como bestia porque no rehúsas de merecer los castigos eternos; y por no padecerlos no admites la eternidad, como si esto excluyera la inmortalidad de tu alma. Engañaste como los necios que dicen que todo es vida hasta la muerte, y lo que llamas muerte su último y menor instante.“