„Existe, de hecho, jueces, una ley no escrita, sino innata, la cual no hemos aprendido, heredado, leído, sino que de la misma naturaleza la hemos agarrado, exprimido, apurado, ley para la que no hemos sido educados, sino hechos; y en la que no hemos sido instruidos, sino empapados.“
— Cicerón
„Sin mentalidad republicana no podrá haber gobierno libre.“
— Simón Bolívar
„Para decirlo, pues, brevemente: los que cuidan de la ciudad han de esforzarse para que esto de la educación no se corrompa sin darse ellos cuenta, sino que en todo han de vigilarlo, de modo que no haya innovaciones contra lo prescrito…“
— Platón
„En el mundo hay gente educada y gente con tacto. Ambas son buenas cualidades, pero en la mayoría de los cados el tacto supera a la educación“
— Haruki Murakami
„La vigilancia de la educación de los jóvenes es fundamental para el buen funcionamiento de la futura ciudad: para decirlo, pues, brevemente: los que cuidan de la ciudad han de esforzarse para que esto de la educación no se corrompa sin darse ellos cuenta, sino que en todo han de vigilarlo, de modo que no haya innovaciones contra lo prescrito ni en la gimnasia ni en la música.“
— Platón
„Cada uno de nosotros es, incluso desde el vientre de nuestra madre, un maestro artesano de ídolos.“
— Juan Calvino
„La sinceridad es el pasaporte de la mala educación.“
— Enrique Jardiel Poncela
„El hábil artesano utiliza el mismo hierro para hacer una herradura que cuando construye un bruñido espejo para el rey.“
— Idries Shah
„Las calles de la ciudad estaban llenas de gente, pero la extranjera no se habría sentido más sola de haber estado desiertas.“
— Markus Zusak
„La mala educación era para él sinónimo de franqueza y hasta honestidad.“
— Roberto Bolaño
„No hay gente buena o mala, no hay personas corruptas o personas deshonestas, personas creativas, personas perezosas. ¡Todo eso es una tontería!“
— Jacque Fresco
„¡Hay gentes a quienes damos las gracias sólo por haberse atravesado en nuestro camino!“
— Fiódor Dostoyevski
„La educación era la nueva divinidad, y los hombres educados los nuevos poderosos hacendados.“
— Charles Bukowski