Citas

„La guerra está en el monte —dijo—. Desde que yo soy yo, en las ciudades no nos matan con tiros sino con decretos.“
„Era todavía demasiado joven para saber que la memoria del corazón elimina los malos recuerdos y magnifica los buenos, y que gracias a ese artificio logramos sobrellevar el pasado.“
„«… y sentí que me hundía en las delicias de las arenas movedizas de su ternura.»“
„La vida mundana, que tantas incertidumbres le causaba antes de conocerla, no era más que un sistema de pactos atávicos, de ceremonias banales, de palabras previstas, con el cual se entretenían en sociedad unos a otros para no asesinarse.“
„La tierra es redonda como una naranja.“
„¿Crees que ella estará de acuerdo?- Ay, mi sabio triste, está bien que estés viejo, pero no pendejo –Dijo Rosa Cabarcas muerta de risa-. Esa pobre criatura está lela de amor por ti.“
„«Los años de ahora ya no vienen como los de antes»“
„Consideraba como una burla de su travieso destino haber buscado el mar sin encontrarlo… y haberlo encontrado entonces sin buscarlo.“
„Es la guerra. Y no me vuelva a decir Aurelito, que ya soy el coronel Aureliano Buendía.“
„«No puede llover toda la vida.»“
„Eran gentes de vidas lentas, a las cuales no se les veía volverse viejas, ni enfermarse ni morir, sino que iban desvaneciéndose poco a poco en su tiempo, volviéndose recuerdos, brumas de otra época, hasta que los asimilaba el olvido.“
„El bisturí es la prueba mayor del fracaso de la medicina“
„La soledad le había seleccionado los recuerdos, y había incinerado los entorpecedores montones de basura nostálgica que la vida había acumulado en su corazón, y había purificado, magnificado y eternizado los otros, los más amargos.“
„l día en que la mierda tenga algún valor los pobres nacerán sin culo“
„…y lo asustó la sospecha tardía de que es la vida, más que la muerte, la que no tiene límites.“
„Desde entonces manifestaba el párroco los primeros síntomas del delirio senil que lo llevó a decir, años más tarde, que probablemente el diablo había ganado la rebelión contra Dios, y que era aquél quien estaba sentado en el trono celeste, sin revelar su verdadera identidad para atrapar a los incautos.“
„Fermina Daza había rechazado a Florentino Ariza en un destello de madurez que pagó de inmediato con una crisis de lástima, pero nunca dudó de que su decisión había sido certera.“
„Yo, Miguel Littín, hijo de Hernán y Cristina, director de cine y uno de los cinco mil chilenos con prohibición absoluta de regresar, estaba de nuevo en mi país después de doce años de exilio, aunque todavía exiliado dentro de mí mismo: llevaba una identidad falsa, un pasaporte falso, y hasta una esposa falsa. Mi cara y mi apariencia estaban tan cambiadas por la ropa y el maquillaje que ni mi propia madre había de reconocerme a plena luz unos días después.“
„Un hombre sólo tiene derecho a mirar a otro hacia abajo, cuando ha de ayudarle a levantarse.“
„… tenía la rara virtud de no existir por completo sino en el momento oportuno.“