Citas

„¿Quiere usted casarse conmigo? ¿Le dejó mucho dinero su difunto marido? Conteste primero a la segunda pregunta.“
„Si las mujeres se vistieran para los hombres, las tiendas no venderían demasiado. A lo sumo un par de gafas de sol cada cierto tiempo.“
„Claro que lo entiendo. Incluso un niño de cuatro años podría entenderlo. ¡Que me traigan un niño de cuatro años!“
„Creo en mí antes que en Dios, pero el problema es que me lleva ventaja porque hay un libro que habla de él y «Playboy» aún no quiere editar un desnudo mío…“
„Cuando muera quiero que me incineren y que el diez por ciento de mis cenizas sean vertidas sobre mi representante.“
„He pasado la mejor noche de mi vida, pero no ha sido ésta.“
„La humanidad, partiendo de la nada y con su solo esfuerzo, ha llegado a alcanzar las más altas cotas de miseria.“
„¡Oiga! la próxima vez que lo vea recuérdeme no saludarlo.“
„No reírse de nada es de tontos, reírse de todo es de estúpidos.“
„Nunca olvido una cara, pero con la suya voy a hacer una excepción.“
„Nunca voy a ver películas donde el pecho del héroe es mayor que el de la heroína.» **refiriéndose a una película de Victor Mature.“
„O él ha muerto o se ha parado mi reloj.“
„¡Oh! Nunca podré olvidar el día que me casé con aquella mujer… Me tiraron píldoras vitamínicas en vez de arroz.“
„Recuerde, señor, que estamos luchando por el honor de esta mujer, probablemente mucho más de lo que ella nunca hizo por sí misma.“
„Se parece a un ascensorista que conocí en Lima, Ohio, hace quince años.“
„Si sigues cumpliendo años, acabarás muriéndote. Besos, Groucho.“
„Sólo lo barato no resulta caro.“
„Soy tan viejo que recuerdo a Doris Day cuando era virgen.“
„Una mañana me desperté y le disparé a un elefante en pijama. ¿Cómo se metió en mi pijama? Nunca lo sabré.“
„Los hermanos Marx en el Oeste“