Página de inicio » Quote » Ayn Rand » „Kant originó la técnica requerida para vender nociones irracionales a los hombres de una edad escéptica y cínica, que han rechazado formalmente el misticismo sin darse cuenta de los rudimentos de la racionalidad. La técnica es la siguiente: Si usted quiere propagar una idea ultrajantemente malvada (basada en doctrinas tradicionalmente aceptadas), su conclusión debe ser desvergonzadamente clara, pero su prueba ininteligible. Su prueba debe ser una madeja tan liada que paralizará la facultad crítica del lector -una madeja de evasiones, equivocaciones, ofuscaciones, circunloquios, non sequiturs, frases inacabables que no llevan a ninguna parte, asuntos colaterales irrelevantes, cláusulas, sub-cláusulas y sub-sub-cláusulas, pruebas meticulosamente largas de lo obvio, y grandes pedazos de lo arbitrario arrojados como verdades evidentes por sí mismas, referencias eruditas a ciencias, a pseudo-ciencias, a lo que jamás llegarán a ser ciencias, a lo que no se puede investigar, a lo incomprobable -todo ello descansando sobre un cero: La ausencia de definiciones. Ofrezco como evidencia la crítica de la razón pura.“
„Kant originó la técnica requerida para vender nociones irracionales a los hombres de una edad escéptica y cínica, que han rechazado formalmente el misticismo sin darse cuenta de los rudimentos de la racionalidad. La técnica es la siguiente: Si usted quiere propagar una idea ultrajantemente malvada (basada en doctrinas tradicionalmente aceptadas), su conclusión debe ser desvergonzadamente clara, pero su prueba ininteligible. Su prueba debe ser una madeja tan liada que paralizará la facultad crítica del lector -una madeja de evasiones, equivocaciones, ofuscaciones, circunloquios, non sequiturs, frases inacabables que no llevan a ninguna parte, asuntos colaterales irrelevantes, cláusulas, sub-cláusulas y sub-sub-cláusulas, pruebas meticulosamente largas de lo obvio, y grandes pedazos de lo arbitrario arrojados como verdades evidentes por sí mismas, referencias eruditas a ciencias, a pseudo-ciencias, a lo que jamás llegarán a ser ciencias, a lo que no se puede investigar, a lo incomprobable -todo ello descansando sobre un cero: La ausencia de definiciones. Ofrezco como evidencia la crítica de la razón pura.“