Página de inicio » Quote » Silvina Ocampo » „El amargo gusto del mar, tan parecido a las lágrimas, entró en mi boca. Me desvanecí. No sé quién nos salvó, pero sea quien fuere, no se lo perdono, pues le debo haber quedado en este mundo de peleas, en lugar de haber perecido en un espléndido naufragio, abrazada a mi marido.“
„El amargo gusto del mar, tan parecido a las lágrimas, entró en mi boca. Me desvanecí. No sé quién nos salvó, pero sea quien fuere, no se lo perdono, pues le debo haber quedado en este mundo de peleas, en lugar de haber perecido en un espléndido naufragio, abrazada a mi marido.“