Juegos
Todos los emojis
Citas
Blog
Página de inicio
»
carta
Relacionado con: carta
„A lo mejor es que cuando uno se enamora de una persona, no la somete antes a un examen para comprobar si sabe escribir una carta de amor.“
„mis canciones son cartas abiertas, y cada una de ellas está escrita teniendo en mente a una persona específica, y explico en ellas lo que debí haberles contado en persona.“
„La canción «Last Kiss» es un tipo de carta para alguien. Dices todos estos sentimientos desesperados y sin esperanza que tienes después de una ruptura. Pasar por una ruptura sientes todas esas cosas diferentes. Sientes ira, y sientes confusión, y frustración. Luego está la tristeza absoluta. La tristeza de perder esa persona, perder todas las memorias, y las esperanzas que tenías para el futuro. Hay ocasiones en las que tienes este momento de la verdad en que sólo te admites que echas de menos todas esas cosas. Cuando estaba en uno de estos momentos escribí esta canción.“
„Usted tiene el Tarot con cartas de póker seguramente.“
„que no conmovieran, especialmente entre las enviadas a casa de los padres. En esta carta se decía poco de las molestias sufridas, de los peligros afrontados o de la nostalgia a la cual había que sobreponerse; era una carta alegre, llena de descripciones de la vida del soldado, de las marchas y de noticias militares; y sólo hacia el final el autor de la carta dejó brotar el amor paternal de su corazón y su deseo de ver a las niñas que había dejado en casa. «Mi cariño y un beso a cada una. Diles que pienso en ellas durante el día, y por la noche oro por ellas, y siempre encuentro en su cariño el mejor consuelo. Un año de espera para verlas parece interminable, pero recuérdales que, mientras esperamos, podemos todos trabajar, de manera que estos días tan duros no se desperdicien. Sé que ellas recordarán todo lo que les dije, que serán niñas cariñosas para ti, que cuando vuelva podré enorgullecerme de mis mujercitas más que nunca.” Todas se conmovían algo al llegar a esta parte, Jo no se avergonzó de la gruesa lágrima que caía sobre el papel blanco, y Amy no se preocupó de que iba a desarreglar sus bucles al esconder la cara en el seno de su madre y dijo sollozando: -¡Soy egoísta! Pero trataré de ser mejor para que no se lleve un chasco conmigo. – ¡Trataremos todas! -exclamó Meg -. Pienso demasiado en mi apariencia y detesto trabajar, pero no lo haré más si puedo remediarlo. -Trataré de ser lo que le gusta a él llamarme «una mujercita», y no ser brusca y atolondrada; cumpliré aquí con mi deber en vez de desear estar en otra parte -dijo Jo, pensando que dominarse a sí misma era obra más difícil que hacer frente a unos rebeldes. Beth no dijo nada, pero secó sus lágrimas con el calcetín del ejército y se puso a trabajar con todas sus fuerzas, no perdiendo tiempo en hacer lo que tenía más cerca de ella, mientras decidía en su corazón ser como su padre lo deseaba cuando al cabo de un“
„No es carta de amor ni elegía; es carta de haberte querido y comprendido desde el principio inmemorable hasta el beso reiterado sobre tus pies amarillos, curiosamente sucios y sin olor.“
„Estas pláticas que yo tengo con mi conciencia son a veces muy largas, duran días enteros; por eso no resulta que me ponga a contártelas en esta pobre carta. De verdad, cuídate mucho, come y duerme bien y sueña con los angelitos y no en esta cosa maligna que soy yo. Pero no me olvides.“
„¡Libros! ¡Libros! Hace aquí una palabra mágica que equivale a decir: «amor, amor», y que debían los pueblos pedir como piden pan o como anhelan la lluvia para sus sementeras. Cuando el insigne escritor ruso Fedor Dostoyevsky, padre de la revolución rusa mucho más que Lenin estaba prisionero en la Siberia, alejado del mundo, entre cuatro paredes y cercado por desoladas llanuras de nieve infinita; y pedía socorro en carta a su lejana familia, sólo decía: «¡Enviadme libros, libros, muchos libros para que mi alma no muera!». Tenía frío y no pedía fuego, tenía terrible sed y no pedía aguapedía libros, es decir, horizontes, es decir, escaleras para subir la cumbre del espíritu y del corazón. Porque la agonía física, biológica, natural, de un cuerpo por hambre, sed o frío, dura poco, muy poco, pero la agonía del alma insatisfecha dura toda la vida.Ya ha dicho el gran Menéndez Pidal, uno de los sabios más verdaderos de Europa, que el lema de la República debe ser: «Cultura». Cultura porque sólo a través de ella se puede resolver los problemas en que hoy se debate el pueblo lleno de fe, pero falto de luz.Medio pan e un libro. Locución de Federico García Lorca al pueblo de Fuente de Vaqueros (Granada)“
„Existe una persecución de los impíos, que ellos ejercen contra la Iglesia de Cristo; también una persecución justa, que la Iglesia ejerce contra los impíos…». (Carta 185, 417 AD).“
„Nunca respondo una carta anónima.“
„LA ESTACIÓN DE FERROCARRIL.Mi no llegada a la ciudad de Ntuvo lugar puntualmente.Fuiste avisadocon una carta no enviada.Lograste no llegara la hora prevista.El tren llegó al andén número tres.Bajó mucha gente.Entre la muchedumbre se dirigió a la salidala ausencia de mi persona.Varias mujeres me sustituyeronrápidamenteen aquella prisa.A una de ellas se acercó corriendoalguien desconocido para mípero ella lo reconocióal instante.Ambos intercambiaronun beso no nuestro,durante el cual se perdióno mi maleta.La estación de la ciudad de Npasó bien el examende la existencia objetiva.La totalidad estaba en su lugar.Los detalles se movíanpor las vías marcadas.Tuvo lugar inclusola cita acordada.Fuera del alcancede nuestra presencia.En el paraíso perdidode la posibilidad.En otra parte.En otra parte.Como suenan estas palabras.“
„Para acabar con el ajedrezCorrespondenciaMetí la pata. Perdóneme. El hecho de que usted no se percatara de que faltaba una carta indica igualmente cierto despiste por su parte, que yo, por la mía, atribuyo a su impaciencia, pero Dios sabe que todos cometemos errores. Así es la vida. Y el ajedrez“
„aplica las siguientes dos máximas y adhiérete a los límites que marcan, por si la culpa y la preocupación no te dejan “descontrolarte” (en el buen sentido). Ponlas en un lugar visible y échale un vistazo de tanto en tanto: 1. Puedes hacer lo que quieras, si no es dañino para ti ni para nadie. 2. Haz lo que quieras, si no violas la Carta Universal de los Derechos Humanos. Que“
„Una fan me mandó una vez una carta y un billete de $10 dólares. La carta decía: Ya que tienes difícil salir a la calle sin que todo el mundo sepa a dónde vas, aquí tienes 10 dólares para que pidas una pizza.“
„Uno puede desayunarse cada mañana viendo en los periódicos y la tele cómo gudaris y otros paladines catalaúnicos, celtas, euskaldunes, andalusíes o de donde sean, incluso cretinos bocazas peinados de través como el coqueto y casposo Iñaki Anasagasti, meten el dedo, removiéndolo, en cuanto ojo encuentran a mano, con tal de joder un poquito más, o se limpian las babas con cualquier bandera que no sea la de su parcelita. Pero que a los demás no se nos ocurra, por Dios, hablar de Historia, ni de España, ni de nada, ni siquiera en términos generales, que no coincida exactamente con lo expuesto en el escaparate de su negocio. Hasta ahí podíamos llegar. (…) Veinticinco siglos de memoria documentada, bibliotecas, viejas piedras y paisajes no tienen la menor importancia frente a la historia local reescrita por mercenarios de pesebre, que es la única que les importa. Mal acostumbrados por gobernantes expertos en succionar entrepiernas a cambio de votos –desde el amigo Aznar al pacífico Zapatero–, a los patriotas de cercanías les sienta fatal que alguien les lleve la contraria a estas alturas del desmadre, cuando gracias a la cobardía, la incultura y la estupidez de la infame clase política española todo parece estar, por fin, al alcance de su mano. Quisieran esos pseudohistoriadores de tebeo que, cada vez que llega una de sus cartas refutando con argumentos de hace tres días lo que gente docta e inteligente tardó siglos en acumular, probar y fijar, yo me levante de la mesa, vaya a mi biblioteca, y ante los veinte mil libros que hay en ella, ante las catedrales, los castillos, los acueductos romanos, las iglesias visigodas y los museos, ante los documentos históricos conservados en los archivos de toda España y de medio mundo, diga: «Mentís como bellacos. Acaba de poneros patas arriba mi primo Astérix con dos recortes de periódico, cuatro cañonazos de Felipe V y las obras completas de Sabino Arana». Encima, oigan, algunos amenazan con no leerme nunca más, o juran que no volverán a hacerlo en el futuro. Para castigarme por españolista, por facha y por cabrón. Y qué quieren que les diga. Que sin lectores así puedo pasarme perfectamente. Que vayan y lean a su puta madre.“
„No quedaba más remedio que jugar la partida con las nueve cartas que el burlón destino acababa de ponerle en las manos, aunque éstas fueran pésimas.“
„Si buscas la fama, más fama te darán mis cartas que todas esas cosas que festejas y por las cuales eres festejado.“
„Fuente: Citado por Séneca en su obra Cartas de Séneca a Lucilio, Carta XVIII.“
„En las cortesías antes se ha de pescar por carta de más que de menos.“
„Jean-Paul Sartre, deseoso de apostar también a la carta comunista, se propuso separar, con la ayuda de los existencialistas alemanes, el existencialismo de la fe, y quiso demostrar que aquél era, en su esencia, puro y crudo ateísmo… Más no advertía el profesor acróbata que quitando al existencialismo su premisa religiosa se corría el riesgo de vaciar de todo sentido posible a sus principios fundamentales. La angustia nace de la idea de pecado, y la idea de responsabilidad de la idea de una ley y de un fin, y tampoco se pueden vivir efectivamente tales conceptos sin la fe en un Dios trascendente.“
1
2
…
5
Siguientes