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Relacionado con: casa
„No subí al autobús para que me arrestaran; subí al autobús para ir a casa.“
„Para mí el mejor novelista vivo de la lengua española que existe hoy es Fernando Vallejo -con quien me disputo el puesto del que ha escrito el peor guión-, quien durante mucho tiempo tocó el piano en un restaurante de la Condesa y nunca ha entrado en esa República de las Letras. Nos dan casa, tenemos editorial, publicamos, pero siempre nos sentimos fuera del castillo, del feudo».“
„Un hombre que se enamora es siempre un imbécil elevado al cubo. Cuando se tratra de un individuo genial, ese individuo escribe La Divina Comedia (caso Dante Alighieri) y le amarga la vida para siempre a la humanidad. Y, por el contrario, cuando se trata de un hombre vulgar, ese hombre hace oposiciones a Hacienda, se casa en la Parroquia (caso Juan Sánchez) y se amarga la vida para siempre a sí mismo.“
„¿Sabes que en las calles no hay nadiey adentro de las casas tampoco?Sólo hay ojos en las ventanas.Si no tienes dònde dormirtoca una puerta y te abrirán,te abrirán hasta cierto puntoy verás que hace frío adentro,que aquella casa está vacía,y no quiere nada contigo,no valen nada tus historias,y si insistes con tu ternurate muerden el perro y el gato.“
„Mucho mayor riesgo se corre en la compra de enseñanzas que en la de alimentos. Porque quien compra comida o bebida al traficante o al comerciante puede transportar esto en otros recipientes y, depositándolo en casa, antes de proceder a comerlo o beberlo, puede llamar a un entendido para pedirle consejo sobre lo que es comestible o potable y lo que no, y en qué cantidad y cuándo. Pero las enseñanzas no se pueden transportar en otro recipiente, sino que, una vez pagado su precio, necesariamente, el que adquiere una enseñanza marcha ya, llevándola en su propia alma, dañado o beneficiado.“
„Y sabe que abandonaría en cualquier la casa de su felicidad, que abandonaría en cualquier momento su paraíso en el que vive con la muchacha del sueño, que traicionaría el «muss sein» de su amor para irse con Teresa, la mujer nacidad de seis ridículas casualidades“
„Y un día, al salir del trabajo, no fue a su casa, sino que salió de la ciudad. No veía nada a su alrededor, no sabía si era verano, otoño o invierno, si caminaba por la orilla del mar o junto al muro de una fábrica; hacía ya mucho que no vivía en el mundo; su único mundo era su alma.“
„Me quedé en casa y leí no sé cuántas horas, pero sólo revistas. No quiero hacerlo más. Me deja una horrible sensación de tiempo derrochado, algo así como si la estupidez me anestesiara el cerebro.“
„Lo recuerdo (yo no tengo derecho a pronunciar ese verbo sagrado, sólo un hombre en la tierra tuvo derecho y ese hombre ha muerto) con una oscura pasionaria en la mano, viéndola como nadie la ha visto, aunque la mirara desde el crepúsculo del día hasta el de la noche, toda una vida entera. Lo recuerdo, la cara taciturna y aindiada y singularmente remota, detrás del cigarrillo. Recuerdo (creo) sus manos afiladas de trenzador. Recuerdo cerca de esas manos un mate, con las armas de la Banda Oriental; recuerdo en la ventana de la casa una estera amarilla, con un vago paisaje lacustre. Recuerdo claramente su voz; la voz pausada, resentida y nasal del orillero antiguo, sin los silbidos italianos de ahora.“
„Yo, Quijano, seré paladín. Seré mi sueño. En esa vieja casa hay una adarga antigua y una hoja de Toledo y una lanza y los libros verdaderos que a mi brazo prometen la victoria.“
„Si para todo hay término y hay tasay última vez y nunca más y olvido¿quién nos dirá de quién en esta casa,sin saberlo, nos hemos despedido?“
„La casa no es tan grande, pensó. La agrandan la penumbra, la simetría, los espejos, los muchos años, mi desconocimiento, la soledad.“
„Esa trama de tiempos que se aproximan, se bifurcan, se cortan o que secularmente se ignoran, abarca todas la posibilidades. No existimos en la mayoría de esos tiempos; en algunos existe usted y no yo; en otros, yo, no usted; en otros, los dos. En éste, que un favorable azar me depara, usted ha llegado a mi casa; en otro, usted, al atravesar el jardín, me ha encontrado muerto; en otro, yo digo estas mismas palabras, pero soy un error, un fantasma.“
„La sociedad ha sido injusta conmigo. Mataremos a cualquier cerdo que esté en la casa. Entren y atrápenlos».“
„Una buena muchacha de casa decente no puede salir, ¿qué diría la gente el domingo en la misa si saben de ti?, ¿qué dirían los amigos, los viejos vecinos que vienen aquí? ¿Qué dirían las ventanas, tu madre y su hermana y todos los siglos de colonialismo español que no en balde te han hecho cobarde?, ¿qué diría ¡Dios! si amas sin la Iglesia y sin la ley? ¡Dios!, a quien ya te entregaste en comunión. ¡Dios!, que hace eternas las almas de los niños que destrozarán las bombas y el napalm.“
„siguió evocando hasta el amanecer las excelencias del marido, sin reprocharle otra deslealtad que la de haberse muerto sin ella, y redimida por la certidumbre de que nunca había sido tan suyo como lo era entonces, dentro de un cajón clavado con doce clavos de tres pulgadas, y a dos metros debajo de la tierra.—Soy feliz —dijo— porque sólo ahora sé con seguridad dónde está cuando no está en la casa.“
„La monja almorzó en casa, mientras pasaba el tren de regreso, y de acuerdo con la discreción que le habían exigido no volvió a mencionar al niño, pero Fernanda la señaló como un testigo indeseable de su vergüenza, y lamentó que se hubiera desechado la costumbre medieval de ahorcar al mensajero de malas noticias.“
„Cuando dieron por fin con la casa, Abrenuncio se despidió en la puerta con una sentencia de Horacio.«No sé latín», se excusó el marqués.«Ni falta que hace», dijo Abrenuncio. Y lo hizo en latín, por supuesto.“
„Venga cuando quiera, a ver si se cumplen mis deseos de que se muera en mi casa.“
„La primera mujer que me fascinó fue la maestra que me enseñó a leer a los cinco años. Pero aquello era distinto. La primera que me inquietó fue una muchacha que trabajaba en la casa. Una noche había música en la casa de al lado, y ella, con la mayor inocencia, me sacó a bailar en el patio. El contacto de su cuerpo con el mío, cuando yo tenía unos seis años, fue un cataclismo emocional del cual todavía no me he repuesto, porque nunca más lo volví a sentir con tanta intensidad, y sobre todo, con semejante sensación de desorden.“
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