Juegos
Todos los emojis
Citas
Blog
Página de inicio
»
convivencia
Relacionado con: convivencia
„La paz es hija de la convivencia, de la educación, del diálogo. El respeto a las culturas milenarias hace nacer la paz en el presente“
„Donde habitaban las Pléyades sube la Unión, Civilización, Congregación, Pueblo, el Estado, la Iglesia, que residen en el campo de la Convivencia, Concordia, Comunidad, presidido por el Amor bien regulado.“
„… no debe ser aceptada ninguna ley que no tenga por finalidad la convivencia humana.»“
„…cada uno acepta lo que va descubriendo de sí mismo en las miradas de los demás, se va formando en la convivencia, se confunde con el que suponen los otros y actúa de acuerdo con lo que se espera de ese supuesto inexistente.“
„El prejuicio es una lacra (no creo que sea una enfermedad psicológica), una malformación de la convivencia humana y por eso, hay que enfrentarlo, denunciarlo y controlarlo, como lo hacemos con cualquier otro mal. No hay excusa.“
„Hay personas tan prudentes que no comen, y otras tan sumisas que piden permiso para hacerlo. Ambas mueren por inanición. La moderación es un atributo admirado por casi todas las culturas y requisito fundamental para garantizar la convivencia y salvaguardar la integridad psicológica de la gente, pero si se hace de ella un supervalor se comienza a transitar peligrosamente por los límites de la falsedad y el bloqueo emocional.“
„Todas las guerras son malas, pero la guerra civil es la peor de todas, pues enfrenta al amigo con el amigo, al vecino con el vecino, al hermano contra el hermano. Hace casi 80 años, entre 1936 y 1939, en tiempos de nuestros abuelos y bisabuelos, una espantosa guerra civil tuvo lugar en España. Causó miles de muertos, destruyó hogares, arruinó el país y llevó a mucha gente al exilio. Para evitar que tan desoladora tragedia vuelva a repetirse nunca es conveniente recordar cómo ocurrió. Así, de aquella desgracia podrán extraerse conclusiones útiles sobre la paz y la convivencia que jamás se deben perder. Lecciones terribles que jamás debemos olvidar.“
„La forma que en política ha representado la más alta voluntad de convivencia es la democracia liberal.“
„Se amaban con ternura, pasión, fidelidad. Trataban de estar siempre juntos y cuando tenían que separarse por cualquier motivo, durante ese tiempo tanto pensaban el uno en el otro que la separación era otra suerte de convivencia, más sutil, más sagaz, más ávida.“
„La amistad se forma poco a poco, con el tiempo, por el trato, con la convivencia.“
„Convalecemos. En general somos gente que no aprende ningún arte u oficio, ni siquiera el de disfrutar de la vida. Reacios a las largas convivencias, en general nos cansan nuestros mejores amigos después de estar media hora con ellos. Sólo queremos verlos cuando no pensamos en verlos y las mejores horas en su compañía son las horas en que soñamos que estamos con ellos. No sé si esto entraña poca amistad. Afortunadamente no es así. Lo cierto es que las cosas que amamos más, o creemos amar más, sólo tienen verdadero valor mientras las soñamos simplemente.“
„Tenemos todos dos vidas: la verdadera, que es la que soñamos en la infancia, y que continuamos soñando, adultos en un sustrato de niebla; la falsa, que es la que vivimos en convivencia con los demás, que es la práctica, la útil, aquella en que terminan por meternos en un cajón.“
„la ética es proactiva, es decir busca lo bueno y no sólo pretende evitar lo malo: a partir de principios morales, proyecta directrices futuras y transforma la convivencia y la colaboración dentro de la empresa, innovando hacia lo mejor y no solo prohibiendo lo evidentemente peor.“
„El nacionalismo al que me opongo es el que mutila y descarta parte de la sociedad plural a la que se aplica: el que quiere dividir la realidad nacional en propietarios y advenedizos, el que pretende inventarse […] un «extranjero interior» contra el que luchar, el que quiere suprimir y monopolizar, poniendo en peligro la ejemplar convivencia de lo diverso que se da en la vida cotidiana de Cataluña.“
„La nación sólo se forma como resultado de relaciones duraderas y regulares, como resultado de la convivencia de los hombres, de generación en generación. Y esta convivencia prolongada no es posible sin un territorio común.“
„Es evidente que el único régimen capaz de resolver la cuestión nacional, es decir, el régimen capaz de crear las condiciones que garanticen la convivencia pacífica y la fraternal colaboración de las diversas naciones y tribus, es el régimen del Poder Soviético, el régimen de la dictadura del proletariado.“
„En las oficinas no hay amigos; hay tipos que se ven todos los días, que rabian juntos o separados, que hacen chistes y se los festejan, que se intercambian sus quejas y se transmiten sus rencores, que murmuran del Directorio en general y adulan a cada director en particular. Esto se llama convivencia, pero sólo por espejismo la convivencia puede llegar a parecerse a la amistad.“
„Carmen siempre ha admirado a los hombres elegantes y convincentes en sus argumentaciones y a lo largo de más de cincuenta años de convivencia sólo he visto otro caso de impacto como el causado por Serrano Suñer y fue el conseguido por López Bravo, ministro de Industria en el gobierno del verano de 1962.“
„Blanca, en cambio, se había acostumbrado a vivir sola. Terminó por encontrar pazen sus quehaceres de la gran casa, en su taller de cerámica y en sus Nacimientos deanimales inventados, donde lo único que correspondía a las leyes de la biología era laSagrada Familia perdida en una multitud de monstruos. El único hombre de su vida eraPedro Tercero, pues tenía vocación para un solo amor. La fuerza de eseinconmovible sentimiento la salvó de la mediocridad y de la tristeza de su destino.Permanecía fiel aun en los momentos en que él se perdía detrás de algunas ninfas depelo lacio y huesos largos, sin amarlo menos por ello. Al principio creía morir cada vezque se alejaba, pero pronto se dio cuenta de que sus ausencias duraban lo que unsuspiro y que invariablemente regresaba más enamorado y más dulce. Blanca preferíaesos encuentros furtivos con su amante en hoteles de cita, a la rutina de una vida encomún, al cansancio de un matrimonio y a la pesadumbre de envejecer juntoscompartiendo las penurias de fin de mes, el mal olor en la boca al despertar, el tediode los domingos y los achaques de la edad. Era una romántica incurable. Alguna veztuvo la tentación de tomar su maleta de payaso y lo que quedaba de las joyas delcalcetín, e irse con su hija a vivir con él, pero siempre se acobardaba. Tal vez temíaque ese grandioso amor, que había resistido tantas pruebas, no pudiera sobrevivir a lamás terrible de todas: la convivencia. Alba estaba creciendo muy rápido y comprendíaque no le iba a durar mucho el buen pretexto de velar por su hija para postergar lasexigencias de su amante, pero prefería siempre dejar la decisión para más adelante.En realidad, tanto como temía la rutina, la horrorizaba el estilo de vida de PedroTercero, su modesta casita de tablas y calaminas en una población obrera, entrecientos de otras tan pobres como la suya, con piso de tierra apisonada, sin agua y conun solo bombillo colgando del techo. Por ella, él salió de la población y se mudó a undepartamento en el centro, ascendiendo así, sin proponérselo, a una clase media a lacual nunca tuvo aspiración de pertenecer. Pero tampoco eso fue suficiente para Blanca.El departamento le pareció sórdido, oscuro, estrecho y el edificio promiscuo. Decía queno podía permitir que Alba creciera allí, jugando con otros niños en la calle y en lasescaleras, educándose en una escuela pública. Así se le pasó la juventud y entró en lamadurez, resignada a que los únicos momentos de placer eran cuando salíadisimuladamente con su mejor ropa, su perfume y las enaguas de mujerzuela que aPedro Tercero cautivaban y que ella escondía, arrebolada de vergüenza, en lo mássecreto de su ropero, pensando en las explicaciones que tendría que dar si alguien lasdescubría. Esa mujer práctica y terrenal para todos los aspectos de la existencia,sublimó su pasión de infancia, viviéndola trágicamente. La alimentó de fantasías, la idealizó, la defendió con fiereza, la depuró de las verdades prosaicas y pudo convertirlaen un amor de novela.“
„Tal ves temía que ese grandioso amor, que había resistido tantas pruebas, no pudiera sobrevivir a la más terrible de todas: la convivencia.“
1
2
Siguientes