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Relacionado con: cuatro
„El día que comprenda usted que el negocio de los libros es miseria y compañía y decida aprender a robar un banco, o a crear uno, que viene a ser lo mismo, venga a verme y le explicaré cuatro cosas sobre cerrojos.“
„Esta vida vale la pena vivirla por tres o cuatro cosas, y lo demás es abono para el campo.“
„La televisión es el Anticristo y le digo yo que bastarán tres o cuatro generaciones para que la gente ya no sepa ni tirarse pedos por su cuenta y el ser humano vuelva a la caverna, a la barbarie medieval, y a estados de imbecilidad que ya superó la babosa allá por el pleistoceno. Este mundo no se morirá de una bomba atómica como dicen en los diarios, se morirá de risa, de banalidad, haciendo un chiste de todo, y además un chiste malo.“
„Quien más quien menos, mis cuatro primos carnales se dedican a la filosofía. Leen libros, discuten entre ellos y son admirados a distancia por el resto de la familia“
„Nietzsche, que era un cronopio como pocos, dijo que sólo los imbéciles no se contradicen tres veces al día. No hablaba de las falsas contradicciones que apenas se rasca un poco son hipocresía deliberada (el señor que da limosna en la calle y explota a cincuenta obreros en su fábrica de paraguas), sino de esa disponibilidad para latir con los cuatro corazones del pulpo cósmico que van cada uno por su lado y cada uno tiene su razón y mueve la sangre y sostiene el universo, ese camaleonismo que todo lector encontrará y amará o aborrecerá en este libro y en cualquier libro donde el poeta rehúsa el coleóptero.“
„Todos vamos a vendernos, Tarumba. Ay, Tarumba, tú ya conoces el deseo. Te jala, te arrastra, te deshace. Zumbas como un panal. Te quiebras mil y mil veces. Dejas de ver mujer cuatro días porque te gusta desear, te gusta quemarte y revivirte, te gusta pasarles la lengua de tus ojos a todas. Tú, Tarumba, naciste en la saliva, quién sabe en qué goma caliente naciste. Te castigaron con darte sólo dos manos. Salado Tarumba, tienes la piel como una boca y no te cansas. No vas a sacar nada. Aunque llores, aunque te quedes quieto como un buen muchacho.“
„«Cuando elegí ser Evita sé que elegí el camino de mi pueblo. Ahora, a cuatro años de aquella elección, me resulta fácil demostrar que efectivamente fue así. Nadie sino el pueblo me llama Evita. Solamente aprendieron a llamarme así los descamisados. Los hombres de gobierno, los dirigentes políticos, los embajadores, los hombres de empresa, profesionales, intelectuales, etc., que me visitan suelen llamarme Señora; y algunos incluso me dicen públicamente Excelentísima o Dignísima Señora y aún, a veces, Señora Presidenta.“
„Citaría a Platón, ya que estaría ante un intelectual. Según él, al principio de la creación, los hombres y las mujeres no eran como son hoy; había sólo un ser, que era bajo, con un cuerpo, pero cuya cabeza tenía dos caras, cada una mirando en una dirección. Era como si dos criaturas estuviesen pegadas por la espalda, con dos sexos opuestos, cuatro piernas, cuatro brazos.Los dioses griegos, sin embargo, eran celosos, y vieron que una criatura que tenía cuatro brazos trabajaba más, dos caras opuesta estaban siempre vigilantes y no podían ser atacadas a traición, cuatro piernas no exigiían tanto esfuerzo para permaneces de pie o andar durante largos períodos. Y lo que era más peligroso: la criatura tenía dos sexos diferentes, no necesitaba a nadie más para seguir reproduciéndose en la Tierra.Entonces dijo Zeus, el supremo señor del Olimpo: Tengo un planpara hacer que esos mortales pierdan su fuerza.Y con un rayo, partió a la criatura en dos, y así creo al hombre y a la mujer. Eso aumentó mucho la población del mundo, y al mismo tiempo desorientó y debilitó a los que en él habitaban, porque ahora tenían que buscar su parte perdida, abrazarla de nuevo, y en ese abrazo recuperar la antigua fuerza, la capacidad de evitar la traición, la resistencia para andar largos períodos y soportar el trabajo agotador. A ese abrazo donde los dos cuerpos se confunden de nuevo en uno lo llamamos sexo.“
„Cuatro tragos al año… sólo actúa así alguien a quien la bebida le ha pegado muy fuerte… con fuerza suficiente para hacerle sangrar.“
„Se puede vivir con el miedo […] Tal vez no eternamente, pero sí mucho tiempo. En cambio, con la ofensa no se puede vivir, porque abre una grieta en tu pensamiento y si miras dentro de ella ves que allí hay cosas vivas, cosas con ojos amarillos que no parpadean y que huele muy mal en esa oscuridad. Y al cabo de un rato acabas por pensar que tal vez haya todo un universo distinto allá abajo, un universo donde hay una luna cuadrada en el cielo, donde las estrellas ríen con voces frías; un universo donde algunos triángulos tienen cuatro lados y otros cinco […]“
„Sintiendo frío, cerré la ventana y recorrí con la mirada la diminuta habitación con su techo inclinado y su estrecha cama. Sorprendido, comprobé que no habría querido estar en ningún otro sitio de los cuatro rincones. Casi me sentía en casa.Quizá a vosotros no os parezca extraño, pero para mí sí lo era. Había crecido entre los Edena Ruh, y para mí, el hogar nunca había sido un lugar. El hogar era un grupo de carromatos y canciones alrededor de una hoguera. Cuando mataron a mi troupe, perdí algo más que a mi familia y a mis amigos de la infancia. Fue como si todo mi mundo hubiera ardido hasta los cimientos.Tras casi un año en la Universidad, empezaba a sentir que pertenecía a ese lugar. Era una sensación extraña, ese cariño a un sitio. En cierto modo era reconfortante, pero el Ruh que llevaba dentro estaba inquieto, pues se rebelaba contra la idea de echar raíces como una planta.Me quedé dormido preguntándome qué habría pensado mi padre de mí.“
„Quizá la mayor facultad que posee nuestra mente sea la capacidad de sobrellevar el dolor. El pensamiento clásico nos enseña las cuatro puertas de la mente, por las que cada uno pasa según sus necesidades.La primera puerta es la puerta del sueño. El sueño nos ofrece un refugio del mundo y de todo su dolor. El sueño marca el paso del tiempo y nos proporciona distancia de las cosas que nos han hecho daño. Cuando una persona resulta herida, suele perder el conocimiento. Y cuando alguien recibe una noticia traumática, suele desvanecerse o desmayarse. Así es como la mente se protege del dolor: pasando por la primera puerta.La segunda es la puerta del olvido. Algunas heridas son demasiado profundas para curarse, o para curarse deprisa. Además, muchos recuerdos son dolorosos, y no hay curación posible. El dicho de que <> es falso. El tiempo cura la mayoría de las heridas. El resto están escondidas detrás de esa puerta.La tercera es la puerta de la locura. A veces, la mente recibe un golpe tan brutal que se esconde en la demencia. Puede parecer que eso no sea beneficioso, pero lo es. A veces, la realidad es solo dolor, y para huir de ese dolor, la mente tiene que abandonar la realidad.La última puerta es la de la muerte. El último recurso. Después de morir, nada puede hacernos daño, o eso nos han enseñado.“
„Pocas cosas hay peores que una enfermedad terrible que se llama el mal de amores que hay quienes incluso lo disfrutan; cuando usted esta enfermo de el mal de amores a usted le da por encerrarse en cuatro paredes y no querer saber de nadie, de nadie.. a usted le da por escuchar música tranquila y a usted le da por extrañarla. Pero por sobre todas las cosas a usted le da por guardar en su pecho la esperanza firme de soñar que la persona que se fue y a la que usted extraña se la este pasando igual de jodido que se la este pasando usted.“
„Llevamos cuatro años juntos y todavía siento por él la misma indefinible alquimia del primer día, una atracción poderosa que el tiempo ha matizado con otros sentimientos, pero que sigue siendo la materia primordial de nuestra unión.“
„Comenzaban por hacer una fogata en el patio con leña y carbón. Encima se colgaba de un trípode una olla de hierro negra por el uso, donde se echaban los ingredientes, en proporción de cuatro tazas de leche por una de azúcar, se aromatizaba con dos palitos de vainilla y la cáscara de un limón, se hervía pacientemente durante horas, revolviendo de vez en cuando con una larguísima cuchara de madera.“
„Es ciertamente increíble cuán insignificante y banal, vista desde fuera, y cuán aturdida y ciega, sentida desde dentro, pasa la vida de la gran mayoría de los hombres. Es un débil anhelar y atormentarse, un sonámbulo tambalearse a través de las cuatro edades de la vida hasta la muerte, en compañía de una serie de pensamientos triviales. Se asemejan a los mecanismos de relojes, que se les da cuerda y se ponen en marcha sin saber por qué. Y cada vez que un hombre es engendrado y nace, de nuevo se le da cuerda al reloj de la vida humana para que entonces vuelva a interpretar su canción tantas veces repetida ya, movimiento a movimiento, compás por compás, con variaciones insignificantes.“
„No he tenido sexo en cuatro días…Tengo tantas ganas que podría follarme al piso, o a mi mismo… ¡Maldición! no puedo follarme a mi mismo… ¡pero puedo follar a un espejo!“
„Podés reírte y ser cruel y sádica y hacer cosas increíbles y desenfrenadas y reírte aún más pero no por ello dejar de saber que te reís dentro de un círculo incandescente, infernal, y aun ebria, aun fornicando con cuatro marineros, saber, con un saber que viene de que vos sos vos, saber que se juega con lo terrible, que se trata de algo eminentemente dramático y esencial.“
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