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Relacionado con: dos
„Donna tuvo la sensación de que ambos habían llegado a conocerse íntimamente y que no podría haber descanso ni término para ninguno de los dos hasta que hubieran explorado aquella terrible relación y hubieran llegado a una conclusión definitiva.“
„Si entre dos personas no se produce nada especial, un instante como ése se pierde en el naufragio general de la memoria.“
„De la Libertad absoluta se desciende siempre al poder absoluto, y el medio entre éstos dos términos es la Suprema Libertad Social.“
„Nuestras discordias tienen su origen en las dos más copiosas fuentes de calamidad pública: la ignorancia y la debilidad.“
„Los dos no cabemos en el Perú.“
„El Perú se ha vuelto una verdadera chingana. Pretextando mala salud, me he excusado de aceptar dos invitaciones a retomar el mando, y permanecí en Mendoza a la expectativa. Sabía que desde allí podía llegar rápidamente a Valparaíso y embarcarme hacia el Perú si la situación lo requería. Pero es claro que Bolívar y yo no cabemos, los dos, en el Perú.“
„Wow. ¿Dónde habéis estado vosotros dos toda mi vida?—Caminando contigo de la mano. ¿No te diste cuenta?Nick se quedó en silencio al percatarse de la verdad de esa declaración. Había caminado de la mano con Dolor y Sufrimiento ya desde su nacimiento.“
„Disculpa un momento, ¿se puede saber qué está pasando aquí? —le preguntó a Julian—. ¿Por qué lo has golpeado?Cuando la miró, el humor brillaba en sus ojos.—Porque me encanta hacerlo.—Muy bonito —le dijo Cupido muy despacio a Julian, sin mirar ni una vez a Grace—. No me has visto desde… ¿cuánto hace ya?, ¿dos mil años? Y, a pesar de eso, en lugar de recibir un abrazo fraternal y amistoso, acabo aporreado. —Cupido miró a Psiqué con una sonrisa socarrona—. Y mamá se pregunta por qué no me relaciono más con mis hermanos…—No estoy de humor para aguantar tus sarcasmos, Cupido —advirtió Julian entre dientes.Cupido resopló.—¿Es que no vas a dejar de llamarme por ese horrible nombre? Jamás he podido soportarlo y no puedo creer que te guste, dado lo mucho que odiabas a los romanos.Julian le dedicó una fría sonrisa.—Lo utilizo porque sé lo mucho que lo odias, Cupido.Cupido apretó los dientes y Grace percibió el esfuerzo que el dios hacía para no abalanzarse sobre Julian.“
„Era muy consciente de que para ellos dos no habría un «y vivieron felices para siempre».“
„Hace dos mil años que lucho solo.—Bueno, nunca se es demasiado viejo para aprender.Kyrian resopló.—No puedes enseñarle trucos nuevos a un perro viejo.—No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy.—El tiempo es oro.—Dios ayuda a los que se ayudan.Él soltó una carcajada.—No vas a dejarme ganar, ¿verdad?“
„[…] ¿Qué es lo que tiene que nos hace olvidar nuestra voluntad? —preguntó.Julian arqueó una ceja con un gesto arrogante.—¿Yo te atraigo en contra de tu voluntad?—Para serte sincera, sí. No me gusta sentirme de este modo.—¿Y cómo te sientes? —le preguntó él.—Sexy —le contestó antes de pensarlo dos veces.—¿Como si fueras una diosa? —preguntó él de nuevo con voz ronca.—Sí —respondió sin más cuando Julian se acercó a ella.[…]—Yo puedo decirte de qué se trata —ronroneó Julian.—Es la maldición, ¿verdad?El hombre negó con la cabeza al tiempo que alzaba una mano para pasarle el dedo muy lentamente por el pómulo. Grace cerró los ojos con fuerza al sentir que la consumía una feroz oleada de deseo. Le estaba costando la misma vida no girar la cabeza para atrapar ese dedo con los dientes.Julian se inclinó un poco más para frotar su mejilla contra la de ella.—Se trata del hecho de que yo aprecio en ti cosas que los hombres de tu época ni siquiera ven.“
„El amor hace extraños compañeros de cama—dijo Ash.—Creí que eso lo hacía la política.—Los dos.“
„Siempre hay tres partes de un recuerdo, la tuya, la de los demás, y la verdad, que está en algún sitio en medio de las otras dos.“
„Las personas engañan y mienten. Cuanto más hay, más planean tomar y más a menudo lo intentan. El mundo es un lugar feo, y la gente, al parecer, en su mayoría piensa que es mejor y más fácil tomar de los demás que ganárselos ellos mismos. (Kyrian)—Entonces, ¿por qué luchas para protegernos? (Nick)—Porque cada vez que pienso que no vale la pena, que la gente merece la miseria de sus vidas, me encuentro con alguien que me hace replantear eso. (Kyrian)—¿Como quién? (Nick)—Un sabihondo Cajun que besa el suelo por el que su madre camina. Uno que estaba dispuesto a dar su vida para proteger a dos extraños de sus mejores amigos, a pesar de que necesitaba el dinero para comer. Una mujer que está dispuesta a rebajarse a sí misma para alimentar a su hijo. Otra que enfrentó a un cártel de drogas con el fin de proteger a su familia y su pequeño pueblo. Esa clase de amor me recuerda al humano que una vez fui. Las personas como tú, tu madre, y Rosa se merecen a alguien que cuide sus espaldas. (Kyrian)“
„Su rabia y pérdida, la entiendo perfectamente, y no la culpo en lo más mínimo. No hay peor sensación que tener todo tu mundo destrozado y que no haya nada que puedas hacer para detenerlo. Sentirte en completa y absoluta miseria, y mirar alrededor y ver un mundo que en realidad no da una mierda por ti… eso te golpea a un nivel que agradezco a los dioses no puedas entender o imaginar. Porque nadie debería conocer ese tipo de infierno. Estás perdido en el dolor, gritando a pleno pulmón pidiendo ayuda y nadie te escucha. A nadie le importa. Ellos siguen con sus putrefactas vidas, ajenos a tu agonía. Y cuando llega el momento en que te das cuenta de lo solo que estás… de lo poco que les importas a otras personas, pierdes todo el funcionamiento cognitivo. Te conviertes en un animal rabioso. Todo lo que importa entonces es que les hagas comprender tu dolor. Sacarlos de su ciega autocomplacencia para que compartan ese infierno tuyo. En ese momento, quieres sentir su sangre en las manos. Saborearla en tus labios. Bañarte en ella hasta estar borracho y tener la piel arrugada. Ese es el lugar de locura que vive profundamente dentro de todos. La mayoría de la gente puede tocarlo una, quizás dos veces en su vida, pero jamás llegan a traspasarlo.“
„Tenía muchos pecados que expiar. Pecados tan grandes que dos mil años de cautiverio ni siquiera bastaban para enmendarlos.No solo era un bastardo por nacimiento; tras una vida brutal, plagada de desesperación y traiciones, había acabado convirtiéndose en uno de verdad.Cerró los ojos y se obligó a alejar esos pensamientos. Eso era, nunca mejor dicho, historia antigua y en esos momentos se encontraba en el presente. Grace era el presente.Y estaba allí por ella.“
„Deja que te de un consejo gratis, chico. Cada vez que algo te ataque, rómpele el cuello o pégale dos tiros. Nunca, nunca dudes. Es infinitamente mejor ser juzgado por doce que tumbado por seis.“
„Hay dos cosas que debéis recordar. La primera es que nuestros nombres nos dan forma, y que nosotros damos forma a nuestros nombres. —Dejó de pasearse y nos miró—. La segunda es que hasta el nombre más sencillo es tan complejo que vuestra mente jamás podría tantear siquiera sus límites, y mucho menos entenderlo lo bastante bien para pronunciarlo.“
„Así que, sí, hasta cierto punto aquellas dos cosas bastarían para fabricar jabón. Pero ¿no sería espantoso? ¿No sería terrible vivir rodeada de la descarnada y cruda vacuidad de las cosas que, sencillamente, bastaban para algo?“
„¿Qué ha sido esa vergonzosa exhibición? —me preguntó Wilem cuando Marea se hubo marchado.—¿Cómo dices?—¿Cómo dices? —repitió imitando mi tono de voz—. ¿Cómo te atreves a fingir siquiera que eres tan imbécil? Si una chica tan guapa como esa me mirara con un solo ojo de la forma en que te ha mirado a ti con los dos… Ya habríamos encontrado una habitación, por expresarlo de forma educada.—Ha sido simpática —protesté—. Y hemos hablado un rato. Me ha preguntado si querría enseñarle algunos acordes de arpa, pero hace mucho tiempo que no toco el arpa.—Pues si sigues pasando por alto insinuaciones como esa, seguirás sin tocarla mucho tiempo —repuso Wilem con franqueza—. Lo único que ha faltado ha sido que se desabrochara otro botón.Sim se inclinó hacia mí y apoyó una mano en mi hombro; era la viva imagen del amigo preocupado.—Kvothe, hace tiempo que quiero hablar contigo de este problema. Si de verdad no te has dado cuenta de que esa chica se interesaba por ti, quizá tengas que admitir la posibilidad de que seas absolutamente inepto en lo relativo a las mujeres. Quizá debas plantearte el sacerdocio.—Estáis borrachos —dije para disimular mi rubor—. ¿Os habéis quedado con que es la hija de un concejal?—¿Te has quedado —replicó Wil en el mismo tono— con cómo te miraba?Yo sabía que era deplorablemente inexperto con las mujeres, pero no tenía por qué reconocerlo. Así que descarté sus comentarios con un ademán y bajé del taburete.—No sé, pero dudo que un revolcón detrás de la barra fuera en lo que estaba pensando esa chica. —Bebí un sorbo de agua y me alisé la capa—. Bueno, tengo que encontrar a mi Aloine y darle las gracias. ¿Qué aspecto tengo?—¿Qué más da? —dijo Wilem.Simmon le tocó el codo a Wilem.—¿No lo ves? Va detrás de una presa más peligrosa que la escotada hija de un concejal.“
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