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Relacionado con: habitual
„Nadie me ofende si me contradice: para una criatura como yo, de opiniones tan poco sólidas, y de sentimientos tan cambiantes, la discrepancia no tiene aquel sentido de agravio que asume para los firmes y para los dogmáticos, porque yo vivo en habitual discordancia conmigo mismo”.“
„Declaro llanamente mi guerra al Estado, a mi modo, aunque seguiré haciendo uso y obteniendo cuantas ventajas pueda de él, como es habitual en estos casos.“
„No debo proceder por tierra hacia el Este, como es habitual, sino por una ruta hacia el oeste, en la dirección en la que hasta ahora no tenemos ninguna evidencia segura de que alguien haya ido.“
„Debemos reservarnos una trastienda del todo nuestra, del todo libre, donde fijar nuestra verdadera libertad y nuestro principal retiro y soledad. En ella debemos mantener nuestra habitual conversación con nosotros mismos, y tan privada que no tenga cabida ninguna relación o comunicación con cosa ajena; discurrir y reír como si no tuviésemos mujer, hijos ni bienes, ni séquito ni criados, para que, cuando llegue la hora de perderlos, no nos resulte nuevo arreglárnoslas sin ellos. Poseemos un alma que puede replegarse en sí misma; puede hacerse compañía, tiene con qué atacar y con qué defender, con qué recibir y con qué dar. No temamos, en esta soledad, pudrirnos en el tedio del ocio: In solis sis tibi turba locis. [En estas soledades, sé una multitud para ti mismo]. La virtud se contenta consigo misma: sin enseñanzas, sin palabras, sin obras.“
„En estas elecciones votad lo que os parezca menos malo. Pero no saldrá de ahí vuestra España, ni está ahí nuestro marco. Esa es una atmósfera turbia, ya cansada, como de taberna al final de una noche crapulosa. No está ahí nuestro sitio. Yo creo, sí, que soy candidato; pero lo soy sin fe y sin respeto. Y esto lo digo ahora, cuando ello puede hacer que se me retraigan todos los votos. No me importa nada. Nosotros no vamos a ir a disputar a los habituales los restos desabridos de un banquete sucio. Nuestro sitio está fuera, aunque tal vez transitemos, de paso, por el otro. Nuestro sitio está al aire libre, bajo la noche clara, arma al brazo, y en lo alto, las estrellas, Que sigan los demás con sus festines. Nosotros fuera, en vigilancia tensa, fervorosa y segura, ya presentimos el amanecer en la alegría de nuestras entrañas.“
„El coronel con su manera de andar habitual que parecía la de un hombre que desanda el camino para buscar una moneda perdida.“
„Un viejo conocido me dio la bienvenida, el gato me miraba con su desdén habitual. Desee ser un dobermann. **Fuente:“
„En una ocasión oí comentar a un cliente habitual en la librería de mi padre que pocas cosas marcan tanto a un lector como el primer libro que realmente se abre camino hasta su corazón. Aquellas primeras imágenes, el eco de esas palabras que creemos haber dejado atrás, nos acompañan toda la vida y esculpen un palacio en nuestra memoria al que, tarde o temprano–no importa cuántos libros leamos, cuántos mundos descubramos, cuánto aprendamos u olvidemos–, vamos a regresar.“
„Ya, ya, puede tratarme todo lo mal que quiera -exclamó con su habitual buen humor la señora Jennings-. Me ha sacado a Charlotte de encima, y no puede devolverla. Así es que ahora se desquita conmigo.Charlotte se rió con gran entusiasmo al pensar que su esposo no podía librarse de ella, y alegremente dijo que no le importaba cuán irascible fuera él hacia ella, igual debían vivir juntos. Nadie podía tener tan absoluto buen carácter o estar tan decidido a ser feliz como la señora Palmer.“
„¡Un mundo sin gente estúpida sería un caos! –era la voz del que llevaba ropa de cuero con cadenas–. ¡En vez de desempleados como tenemos hoy, habría empleos de sobra y nadie para trabajar!–¡Basta! –Mi voz sonó autoritaria, decisiva–. ¡Que nadie diga nada más!Y para mi sorpresa, se hizo el silencio. Mi corazón hervía por dentro, pero seguí hablando con los policías como si fuese la persona más tranquila del mundo.–Si fueran peligrosos, no estarían provocando.El policía se volvió hacia el cajero: –Si nos necesita, estaremos cerca.Y antes de salir, comentó con el otro, de modo que su voz se oyese en toda la tienda:–Me encanta la gente estúpida: sin ella, a esta hora podríamos vernos obligados a enfrentarnos a unos atracadores.–Tienes razón –respondió el otro policía–. La gente estúpida nos distrae, y no es arriesgado.Con la formalidad habitual, se despidieron de mí.“
„Veréis, mi espectacular llegada a la Universidad había causado un revuelo considerable. Había entrado en el Arcano en tres días en lugar de en tres bimestres, que era lo habitual. Era el miembro más joven, con casi dos años de diferencia. Había desafiado abiertamente a un maestro delante de toda la clase y me había salvado de la expulsión. Me habían azotado y no había llorado ni sangrado.Por si eso fuera poco, había conseguido enfurecer al maestro Elodin hasta el punto de que él me había empujado desde el tejado de las Gavias. Dejé que esa historia circulara sin corregirla, pues era preferible a la bochornosa verdad.Todo eso era suficiente para generar un constante flujo de rumores sobre mí, y decidí aprovecharme de ello. La reputación es como una especie de armadura, o un arma que puedes blandir en caso de necesidad. Decidí que, ya que iba a ser arcanista, ¿por qué no ser un arcanista famoso?Así que solté unas cuantas informaciones: me habían admitido sin carta de recomendación. Los maestros me habían dado tres talentos en lugar de cobrarme la matrícula. Había sobrevivido varios años en las calles de Tarbean, viviendo de mi ingenio.Incluso lancé unos cuantos rumores que eran auténticas sandeces, mentiras descaradas que la gente repetía pese a que resultaba evidente que no eran ciertas. Tenía sangre de demonio en las venas. Veía en la oscuridad. Solo dormía una hora todas las noches. Cuando había luna llena, hablaba en sueños, en un idioma extraño que nadie entendía.Basil, mi antiguo compañero de litera de las Dependencias, me ayudó a propagar esos rumores. Yo me inventaba la historia, él se la contaba a unos cuantos, y juntos veíamos cómo se extendían como el fuego por un campo. Era un pasatiempo muy entretenido.“
„Había adoptado un nuevo nombre por las razones habituales, y también por algunas no tan habituales, entre las que estaba el hecho de que, para él, los nombres tenían importancia.“
„lo amaban sin sofocarlo y lo trataban con la negligencia habitual de esa época, antes de que los niños se convirtieran en proyectos.“
„Sobre todo examinen lo habitual. No acepten sin discusión las costumbres heredadas. Ante los hechos cotidianos, por favor, no digan: ‘Es natural’. En una época de confusión organizada, de desorden decretado, de arbitrariedad planificada y de humanidad deshumanizada… Nunca digan: ‘Es natural’, para que todo pueda ser cambiado.“
„No acepten lo habitual como cosa natural pues“
„En ningún lugar encuentra el hombre refugio más apacible, más tranquilo, que en su propia alma, sobre todo cuando atesora aquellos bienes que, con una sola ojeada, nos devuelven en seguida la libertad del espíritu: y lo que yo llamo libertad de espíritu no es otra cosa que el estado de un alma bien ordenada. Concédete, pues, constantemente, este descanso y rehazte con él. Tendrás para ello ciertas máximas breves y elementales que, prontamente reducidas a la memoria, te borrarán toda pesadumbre y te restituirán libre de enfado, a tus funciones habituales. Porque, ¿qué cosa no puedes soportar con paciencia? ¿La ruindad de los hombres? Recuerda a este respecto que los seres razonables nacieron el uno para el otro, que de justicia deben sufrirse mutuamente, que sus faltas son involuntarias; piensa en los que, heridos de muerte, dados a la enemistad, al odio, traspasados por la lanza, están tendidos en la tumba, reducidos a cenizas. ¡Cálmate, pues!“
„Una sociedad se embrutece más con el empleo habitual de los castigos que con la repetición de los delitos.“
„La mentira más habitual es aquella por la que uno se miente a sí mismo.“
„Admitir que la no-verdad es condición de la vida: esto significa, desde luego, enfrentarse de modo peligroso a los sentimientos de valor habituales; y una filosofía que osa hacer esto se coloca, ya sólo con ello, más allá del bien y del mal.“
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