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„Soy feliz; este frío es tan puro, tan pura la noche; ¿no soy yo mismo una onda de aire helado? No tener ni sangre, ni linfa, ni carne. Deslizarse por este largo canal hacia aquella palidez. Ser sólo frío.“
„Algo comienza para terminar; la aventura no admite añadiduras; sólo cobra sentido con su muerte. Hacia esta muerte, que acaso sea también la mía, me veo arrastrado irreversiblemente. Cada instante aparece para traer los siguientes. Me aferro a cada instante con toda el alma; sé que es único, irreemplazable, y, sin embargo, no movería un dedo para impedir su aniquilación.“
„Así es el tiempo, el tiempo desnudo; viene lentamente a la existencia, se hace esperar y cuando llega uno siente asco porque cae en al cuenta de que hacía mucho que estaba ahí.“
„La política de represión nacionalista es también peligrosa en otro aspecto para la causa del proletariado. Esta política desvía la atención de extensas capas del mismo de las cuestiones sociales, de las cuestiones de la lucha de clases hacia las cuestiones nacionales, hacia las cuestiones comunes al proletariado y a la burguesía.“
„Finalmente, yo afirmaba, hablando del tercer problema, que Semic hacía un «intento de tratar la cuestión nacional en Yugoslavia al margen de la situación internacional y de las probables perspectivas en Europa.“
„Los modos de hacer la guerra, las formas de la guerra no son siempre iguales. Cambian con arreglo a las condiciones del desarrollo y, ante todo, con arreglo al desarrollo de la producción. En tiempos de Gengis Kan, la guerra no se hacía lo mismo que en tiempos de Napoleón III, y en el siglo XX no se hace lo mismo que en el siglo XIX. El arte de la guerra en las condiciones actuales consiste en dominar todas las formas de la guerra y todos los adelantos de la ciencia en este terreno, en utilizarlos inteligentemente, en combinarlos con acierto o en aplicar a tiempo unas u otras formas, según sea la situación.“
„La Unión de Repúblicas, creada sobre la base de la igualdad y el libre consentimiento de los obreros y campesinos de las distintas repúblicas, es la primera experiencia del proletariado para normalizar las relaciones internacionales de países independientes y el primer paso hacia la creación de la futura República Soviética Mundial del Trabajo.“
„Este carácter voluntario de la federación tiene que mantenerse forzosamente también en lo sucesivo, ya que sólo la federación de este tipo puede llegar a ser la forma de tránsito hacia la suprema unión de los trabajadores de todos los países en una sola economía mundial, unión cuya necesidad se hace cada vez más tangible.“
„El capitalismo podrá estabilizarse parcialmente, podrá racionalizar su producción, entregar el gobierno del país al fascismo, reprimir temporalmente a la clase obrera, pero no volverá jamás a disfrutar de la tranquilidad y la seguridad, del equilibrio y la estabilidad de que hacía gala antes, pues la crisis del capitalismo mundial ha alcanzado un grado tal de desarrollo, que la hoguera de la revolución se encenderá inevitablemente, ya en los centros del imperialismo, ya en la periferia, haciendo trizas los remiendos capitalistas y aproximando, día tras día, la caída del capitalismo. Punto por punto como en la conocida fábula: si saca el rabo, se le hunde el hocico; si saca el hocico, se hunde el rabo.“
„Para consolidar esta unión es necesario, ante todo, poner fin al apartamiento y al retraimiento de las regiones periféricas, al patriarcalismo y a la incultura, a la desconfianza hacia el centro, esa herencia que ha dejado en las regiones periféricas la política bestial del zarismo. (10 de octubre de 1920).“
„Marchamos hacia Octubre y triunfamos en él en unión de los campesinos pobres, tropezando con la resistencia de los kulaks (ellos también son campesinos) y las vacilaciones de los campesinos medios». (20 de mayo de 1927).“
„Nieva sobre Edimburgo el 16 de abril de 1874. Un frío gélido azota la ciudad. Los viejos especulan que podría tratarse del día más frío de la historia. Diríase que el sol ha desaparecido para siempre. El viento es cortante; los copos de nieve son más ligeros que el aire.¡Blanco! ¡Blanco! ¡Blanco!Explosión sorda. No se ve más que eso. Las casas parecen locomotoras de vapor, sus chimeneas desprenden un humo grisáceo que hace crepitar el cielo de acero. Las pequeñas callejuelas de Edimburgo se metamorfosean. Las fuentes se transforman en jarrones helados que sujetan ramilletes de hielo. El viejo río se ha disfrazado de lago de azúcar glaseado y se extiende hasta el mar. Las olas resuenan como cristales rotos. La escarcha cae cubriendo de lentejuelas a los gatos. Los árboles parecen grandes hadas que visten camisón blanco, estiran sus ramas, bostezan a la luna y observan cómo derrapan los coches de caballos sobre los adoquines. El frío es tan intenso que los pájaros se congelan en pleno vuelo antes de caer estrellados contra el suelo. El sonido que emiten al fallecer es dulce, a pesar de que se trata del ruido de la muerte. Es el día más frío de la historia. Y hoy es el día de mi nacimiento. […]Fuera nieva con auténtica ferocidad. La hiedra plateada trepa hasta esconderse bajo los tejados. Las rosas translúcidas se inclinan hacia las ventanas, sonrojando las avenidas, los gatos se transforman en gárgolas, con las garras afiladas. En el río, los peces se detienen con una mueca de sorpresa. Todo el mundo está encantado por la mano de un soplador de vidrio que congela la ciudad, expirando un frío que mordisquea las orejas. En escasos segundos, los pocos valientes que salen al exterior se encuentran paralizados, como si un dios cualquiera acabara de tomarles una foto. Los transeúntes, llevados por el impulso de su trote, se deslizan por el hielo a modo de baile. Son figuras hermosas, cada una en su estilo, ángeles retorcidos con bufandas suspendidas en el aire, bailarinas de caja de música en sus compases finales, perdiendo velocidad al ritmo de su ultimísimo suspiro.Por todas partes, paseantes congelados o en proceso de estarlo se quedan atrapados. Solo los relojes siguen haciendo batir el corazón de la ciudad como si nada ocurriera.“
„¡El corazón de aquella chica invisible era un puto cubo de Rubik! Por más que lo hacía girar en todos los sentidos, no llegaba a juntar los cuadritos del mismo color en la cara correcta.“
„Hacía apenas unas horas, tenía a mi corazón por un navío capaz de romper las aguas de un océano enfurecido. Ya sabía que no era precisamente el más sólido del mundo, pero creía en el poder de mi entusiasmo.“
„Hay una acacia, ya sé que solo da espinas y sombras cortantes, pero está viva, tendrás algo vivo a tu lado. Te dará de beber su savia, te escaparás a través de sus raíces y florecerás desplegándote hacia el cielo.“
„En el siglo XVIII, sabíamos cómo se hacía cada cosa; pero aquí subo por el aire, oigo voces de América, veo volar a los hombres, y ni siquiera puedo adivinar cómo se hace todo. Vuelvo a creer en la magia.“
„Hablaban de todas las cosas del mundo, le parecía ahora; eran demasiado tolerantes para reírse de los demás; le habían enseñado, aunque era solo una niña, a veneraar la belleza. ¿Que había de belo en ese sofocante salón londinense?- ¡Oh, pobres flores! – exclamó.Porque había un par de claveles pisoteados, porque los pétalos de las flores estaban arrugados y mustios. POr sus sentimientos hacia las flores eran casi excesivos. Su madre las adoraba; desde niña le habían enseñado que dañar una flor era dañar lo más exquisito de la naturaleza.“
„y se vio a sí misma saliendo hacia la fiesta, y al pensar en este aspecto de la naturaleza humana, con su paciencia y su capacidad de sufrimiento y de encontrar satisfacción en placeres tan nimios, exiguos y sórdidos, se le llenaron los ojos de lágrimas.“
„¿Quién lee para llegar al final, por deseable que éste sea? ¿Acaso no hay ocupaciones que practicamos porque son buenas en sí mismas, y placeres que son absolutos? ¿Y no está éste entre ellos? A veces he soñado que cuando llegue el Día del Juicio y los grandes conquistadores y abogados y estadistas vayan a recibir sus recompensas – sus coronas, sus laureles, sus nombres grabados indeleblemente en mármol imperecedero-, el Todopoderosos se volverá hacia Pedro y le dirá, no sin cierta envidia cuando nos vea llegar con nuestros libros bajo el brazo: «Mira, ésos no necesitan recompensa. No tenemos nada que darles. Han amado la lectura.“
„Uno no puede traer hijos a un mundo como éste. Uno no puede perpetuar el sufrimiento, ni aumentar la raza de esos lujuriosos animales, que no tienen emociones duraderas, sino tan solo caprichos y vanidades que ahora les llevan a un lado, y luego hacía otro.“
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