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Relacionado con: manos
„se encontraba su hombre junto a una computadora portátil abierta, tecleando algo con las manos enfundadas en unos guantes de látex.“
„Las democracias observan más cuidadosamente las manos que las mentes de quiénes las gobiernan.“
„Aquellos que no se entusiasman con nada se enfrían y comienzan a morirse. Hay que empezar a desear de verdad. Coger la vida con las dos manos para que no se escape, si es que comprendéis lo que quiero decir. Si no, todo está perdido.“
„Luisa, es peligroso pasar días enteros con la cabeza abatida sobre el pecho, las manos inertes, la mirada vaga; es peligroso buscar las avenidas sombrías y no participar de las diversiones que regocijan los corazones de las las jóvenes; es peligroso, Luisa, escribir con a punta del pie; como sueles hacer, sobre la arena, letras que, por más que te apresures a borrarlas; siempre aparecen por debajo del talón, principalmente cuando esas letras se asemejan más a una L que a una B; es peligroso, en fin, forjarse allá en la mente mil extrañas ilusiones, fruto de la soledad y de los dolores de cabeza; esas ilusiones socavan las mejillas de una pobre muchacha al mismo tiempo que su cerebro, y no es cosa rara ver en esas ocasiones a una persona de amable y risueño trato volverse taciturna y fastidiosa, y a la de más talento convertida en una imbécil.“
„Eso que llamamos destino, esta en una gran parte en manos de los hombres, cuando estos tienen ideas claras y propósitos firmes.“
„El hombre es inteligente porque tiene manos.“
„A menudo me he interrogado sobre la razón y el sentido de mis rabietas. Creo que se explican en parte por una vitalidad fogosa y por un extremismo al cual nunca he renunciado del todo. Llevaba mis repugnancias hasta el vómito, mis deseos hasta la obsesión; un abismo separaba las cosas que me gustaban de las que no me gustaban. No podía aceptar con indiferencia la caída que me precipitaba de la plenitud al vacío, de la beatitud al horror; si la consideraba fatal, me resignaba; nunca me enojé contra un objeto. Pero me negaba a ceder a esa fuerza impalpable: las palabras; lo que mesublevaba es que una frase lanzada al descuido: «Debes hacerlo… no debes hacerlo», arruinara en un instante mis empresas y mis alegrías. Loarbitrario de las órdenes y de las prohibiciones contra las que chocaba denunciaba su inconsistencia; ayer pelé un durazno: ¿por qué no esa ciruela?, ¿por qué dejar mis juegos justo en este minuto? En todas partes encontraba obligaciones, en ninguna parte su necesidad. En el corazón de la ley que me abrumaba con el implacable rigor de las piedras, yo entreveíauna ausencia vertiginosa: me sumergía en ese abismo, la boca desgarrada por gritos. Aferrándome al suelo, pataleando, oponía mi peso de carne al aéreo poder que me tiranizaba; lo obligaba a materializarse; me encerraban en un cuarto oscuro entre escobas y plumeros; entonces podía golpear con los pies y las manos en muros verdaderos, en vez de debatirme contra inasibles voluntades. Yo sabía que esa lucha era vana; desde el momento en que mamá me había sacado de las manos la ciruela sangrienta, en que Louise había guardado en su bolsa mi pala y mis moldes, yo estaba vencida; pero no me rendía. Cumplía el trabajo de la derrota. Mis sobresaltos, las lágrimas que me cegaban, quebraban el tiempo, borraban el espacio, abolían a la vez el objeto de mi deseo y los obstáculos que me separaban de él. Me hundía en la noche de la impotencia; ya nada quedaba salvo mi presencia desnuda y ellaexplotaba en largos aullidos.“
„… el derecho de interpretar las leyes y de comunicar las respuestas de Dios estaba en poder de uno, mientras que el derecho y el poder de gobernar el Estado según las leyes ya explicadas, y las respuestas ya comunicadas estaban en manos de otro.“
„… aunque la Escritura está en vuestras manos, es falsa vuestra afirmación de que poseéis la ley de Dios, puesto que la habéis hecho inútil.“
„Filipo estuvo más seguro en el campo de batalla que en el teatro, evitó muchas veces caer en manos de sus enemigos, pero no pudo evitar caer en manos de los suyos.“
„Las 11 reglas para una vida profundamente satisfactoria 1. Antepón las personas a las posesiones. 2. Nunca dejes de hacer lo que más te gusta. 3. Mantente siempre fiel a ti mismo. 4. Recuerda que no vemos el mundo tal como es, sino tal como somos nosotros. 5. Convierte tus heridas en sabiduría, y en tus errores busca virtudes. 6. Sé la persona más amable que conozcas. 7. Haz como mínimo una cosa al día que te haga sudar las palmas de las manos. 8. Lee como mínimo media hora al día textos de reflexión personal. 9. Pasa al menos una hora por semana en silencio y rodeado de naturaleza para renovarte. 10. Comprométete a cumplir un programa de ejercicio serio para disfrutar de un mejor estado físico. 11.“
„Daisy no lo pensó. Llevaba horas trabajando, su matrimonio era una farsa y había sido humillada en público por el hombre que había jurado honrarla ante Dios. Con rapidez, recogió la tarta con una mano y se la lanzó.-¡Eres un imbécil!Alex extendió las manos automáticamente para impedir que se la arrojara, pero no fue lo suficientemente rápido. La tarta le dio en el hombro y se deshizo en mil pedazos.Ella observó el desastre con una curiosa indiferencia. Trocitos de tarta y azúcar glas habían volado por todas partes. Una pegajosa sustancia blanca salpicaba el pelo, las cejas e incluso las pestañas de Alex. Los pedazos de chocolate que se le habían quedado pegados a la mandíbula cayeron sobre el hombro de su camiseta. La indiferencia de Daisy desapareció cuando vio que se ponía rojo.Iba a matarla.Él intentó limpiarse los ojos a la vez que se movía hacia ella. Daisy se apartó de su camino y, aprovechando la ceguera temporal de Alex, salió corriendo por la puerta.“
„Esto no me gusta -susurró ella-, no me gusta nada.-Has caído en las manos del diablo cariño. Cuanto antes lo aceptes, mejor será para ti.“
„−Debe prometerme, entrenador, que no la lastimará.−Lo prometo.−Lo ha dicho demasiado rápido para mi gusto. La verdad es que no le creo.−Soy un hombre de palabra, y le prometo que no la lastimaré. −Flexionó las manos−. Cuando la asesine, lo haré tan rápido que no sentirá nada.“
„La libertad no es una fruta al alcance de todas las manos.“
„¿Quién los jueces con pasión,sin ser ungüento hace humanos,pues untándoles las manosles ablanda el corazón?“
„Escribo de noche a pesar de que la luna tiene las manos frías.“
„Pa’ olvidarte dame un alma que no sepa nada de tus manos“
„Ojalá cobraran voz mis brazos, y mis manos, y mi pelo, y mis pies, por el arte de Dédalo o de algún dios, para agarrarse todos de tus rodillas, conjurándote con llanto y con palabras de todas las clases.“
„Puedo darte el mundo mientras te reís y me hacés sufrir. ¡Loca, es tan absurdo! Yo te di un lugar, yo te di mis manos; y que estemos juntos.“
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