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„Para bien o para mal, el dominio del aire es hoy la máxima expresión del poderío militar. Las flotas y los ejércitos, aunque necesarios, deben aceptar un lugar subordinado.“
„Las pinturas más audaces, las descripciones más osadas, las situaciones más extraordinarias, las máximas más espantosas, las pinceladas más enérgicas tienen el sólo objeto de obtener una de las más sublimes lecciones de moral que el hombre haya recibido nunca.“
„¿Puedes escucharlos? –reclamó. –¡Oh, eso no es justo para nada!–Todo es muy romántico, –dijo Gabriel y frunció el ceño. – O lo sería si mi hermano pudiera soltar una palabra sin sonar como una rana atragantándose. Me temo que no pasará a la historia como uno de los máximos conquistadores de las mujeres en el mundo.“
„¡LA fatiga de ser amado, de ser amado de verdad! ¡la fatiga de ser objeto del fardo de las emociones ajenas! Convertir a quien quisiera verse libre, siempre libre, en el chico de los recados de la responsabilidad de corresponder, de la decencia de no alejarse, para que no se imagina que se es príncipe en las emociones y se reniega el máximo que puede dar un alma humana. ¡La fatiga de, en todo caso, tener forzosamente que sentir, tener forzosamente, aunque sin reciprocidad, que amar también un poco.!.“
„El máximo de poder es la iniciación de la decadencia.“
„El mundo está lleno de buenas máximas y vacío de gente que las aplique.“
„Todas las buenas máximas están en el mundo; sólo hace falta aplicarlas.“
„Aquel gentío, aquellos gritos, 《¡Franco! ¡Franco! ¡Franco!》, aquellas banderas españolas… Nadie trabajaba esa tarde. Las empresas habían dado permiso a sus empleados para ir a recibir al 《salvador》de la patria. Y la gente, como una alfombra extendida sobre las calles, lo llenaba todo, hasta el último rincón. ¿La misma gente que había luchado por la República? ¿La misma cuyos padres, maridos o hijos habían caído en el frente? ¿La misma que soportó los atroces bombardeos que buscaban crear el máximo miedo en la población civil? ¿La misma que pasó hambre y frío? Aquella mañana del 26 de enero de 1939, viendo a las tropas victoriosas entrando por la Diagonal, se preguntó de dónde sacaban los supervivientes las banderas, y si el entusiasmo y la alegría eran reales o un simple alivio por el fin de la guerra. Habían pasado poco más de diez años y todo seguía igual o… Banderas, saludos fascistas, gritos de adhesión al vencedor.¿Tan rápido el olvido?¿Tanta necesidad de paz a cualquier precio?¿Tanto miedo que masticar y tragar con tal de seguir adelante?¿Y los más de cien mil cadáveres enterrados en cunetas y montañas, fosas comunes y cementerios, a la espera de un tiempo mejor en el que volver a merecer un respeto y recuperar su dignidad, mientras el régimen seguía fusilando y aumentando la cuenta?El dictador volvía por tercera vez a Barcelona y allí estaba la ciudad rendida a sus pies.Tal vez los que permanecían en sus casas fueran más numerosos, mucho más, pero ellos callaban.También lo hacían algunos de los presentes, obligados a presenciar toda aquella parafernalia porque si no podían ser represaliados por sus empresas, que en caso de estar lejos habían puesto autocares para la movilidad de sus empleados. Era un día sin excusas. Hasta los enfermos debían curarse milagrosamente.“
„En cuanto a nuestra política para con los enemigos interiores, ésta debe seguir y sigue siendo la misma que en los tres períodos, es decir, una política de aplastamiento de todos los enemigos del proletariado. Naturalmente, ésta no puede ser considerada como una política de libertad general, pues en la época de la dictadura del proletariado no puede haber en nuestro país ninguna libertad general, es decir, ninguna libertad de palabra, ninguna libertad de imprenta, etc. para la burguesía. Nuestra política interior se reduce a conceder a las capas proletarias de la ciudad y del campo la máxima libertad, para que los restos de la clase burguesa no tengan la libertad más mínima. Esta es la esencia de nuestra política, que se apoya en la dictadura del proletariado.“
„Son culpables todos los que han contribuido a despertar la conciencia del sexo y son aquellos que me empujan, cuando quiero usar al máximo mis facultades en un libro, a buscar esta satisfacción en aquella época feliz, anterior a Miss Davis y Miss Clough, en que el escritor utilizaba ambos lados de su mente a la vez. (…) Es funesto para todo aquel que escribe el pensar en su sexo. Es funesto ser un hombre o una mujer a secas (…) Y por funesto entiendo mortal; porque cuanto se escribe con esta parcialidad consciente está condenado a morir.“
„La cosa más bella que podemos experimentar es lo misterioso. Es la fuente de toda verdad y ciencia. Aquel para quien esa emoción es ajena, aquel que ya no puede maravillarse y extasiarse ante el miedo, vale tanto como un muerto: sus ojos están cerrados… Saber que lo impenetrable para nosotros existe realmente, manifestándose como la prudencia máxima y la belleza más radiante que nuestras torpes capacidades pueden comprender tan sólo en sus formas más primitivas… Este conocimiento, este sentimiento, se encuentran en el centro de la verdad religiosa. En ese sentido, y sólo en ese sentido, pertenezco a las filas de los hombres religiosos devotos.“
„Un error mínimo al principio puede ser máximo al final.“
„Si hay cosas que pueden existir o no existir, es necesario que esté determinado un tiempo máximo para su existencia y su inexistencia; quiero decir un tiempo durante el cual es posible que la cosa exista con arreglo a cualquier forma de predicación, verbigracia: hombre, blanco, de tres codos u otra cualquiera de las cosas de este tipo.“
„La unidad de Gaviria: ése mide 280 Uribes, que es la máxima posible indignidad y bellaquería a que puede llegar una persona en Colombia.“
„No hagan con otros lo que hicieron con ustedes, no paguen con la misma moneda, el mal con el mal, que imponer la vida es el crimen máximo. Dejen tranquilo al que no existe, ni está pidiendo venir, en la paz de la nada.“
„Yo sí digo cosas que pueden impresionar a la gente, creo. Pero no hago cosas que las sorprendan de mala manera. No sé cuánto tiempo voy a estar en este planeta, así que mientras este aquí, Yo también voy a aprovecharlo al máximo.“
„Sócrates no encaminó sus miras hacia las fantasías vanas; su fin fue proveernos de preceptos y máximas, que real y conjuntamente sirviesen para el gobierno de nuestra vida; Observar una regla de conducta, perseverar hacia un fin, seguir la naturaleza.“
„Lo que menos odio es la parte mecánica, rutinaria, de mi trabajo: el volver a pasar un asiento que ya redacté miles de veces, el efectuar un balance de saldos y encontrar que todo está en orden, que no hay diferencias a buscar. Ese tipo de labor no me cansa, porque me permite pensar en otras cosas y hasta (¿por qué no decírmelo a mí mismo?) también soñar. Es como si me dividiera en dos entes dispares, contradictorios, independientes, uno que sabe de memoria su trabajo, que domina al máximo sus variantes y recovecos, que está seguro siempre de dónde pisa, y otro soñador y febril, frustradamente apasionado, un tipo triste que, sin embargo, tuvo, tiene y tendrá vocación de alegría, un distraído a quien no le importa por dónde corre la pluma ni qué cosas escribe la tinta azul que a los ocho meses quedará negra“
„Es como si me dividiera en dos entes dispares, contradictorios, independientes, uno que sabe de memoria su trabajo, que domina al máximo sus variantes y recovecos, que está seguro siempre de dónde pisa, y otro soñador y febril, frustradamente apasionado, un tipo triste que, sin embargo, tuvo, tiene y tendrá vocación de alegría, un distraído a quien no le importa por dónde corre la pluma ni qué cosas escribe la tinta azul que a los ocho meses quedará negra.“
„Desde el dormitorio, ella me llamó. Se había levantado, así, envuelta en la frazada, y estaba junto a la ventana, mirando llover. Me acerqué, yo también miré cómo llovía, no dijimos nada por un rato. De pronto tuve conciencia de que ese momento, de que esa rebanada de cotidianidad, era el grado máximo de bienestar, era la Dicha. Nunca había sido tan plenamente feliz como en ese momento, pero tenía la hiriente sensación de que nunca mas volvería a serlo, por lo menos en ese grado, con esa intensidad.“
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