Juegos
Todos los emojis
Citas
Blog
Página de inicio
»
multitud
»
Página 3
Relacionado con: multitud
„La multitud no envejece ni adquiere sabiduría: siempre permanece en la infancia.“
„Ignoran que la multitud no odia, odian las minorías, porque conquistar derechos provoca alegría, mientras perder privilegios provoca rencor.“
„Así pues el Estado no se enfrenta nunca intencionalmente contra el sentido del hombre, intelectual y moral, sino contra su cuerpo, sus sentidos. No se arma de honestidad o de ingenio superior sino de mayor fuerza física. Pero yo no he nacido para ser violentado. Y respiraré a mi aire; veremos quién es el más fuerte. ¿Qué fuerza tiene la multitud? Sólo pueden forzarme a algo aquellos que obedecen a una ley superior a la mía. Me obligan a ser como ellos. ¿Qué vida sería ésta? Cuando doy con un gobierno que me dice: ‘tu dinero o tu vida’. ¿Por qué he de apresurarme a darle mi dinero?.“
„Hay gente sola en medio de una multitud, y hay gente acompañada en medio del desierto.“
„Las avenidas están llenas de gente, pero suele parecer que están vacías, llenas de multitudes invisibles, llenas de vacío.“
„Lo que pasa es que rara vez pienso; entonces sin darme cuenta, se acumula en mí una multitud de pequeñas metamorfosis, y un buen día se produce una verdadera revolución. Es lo que ha dado a mi vida este aspecto desconcertante, incoherente.“
„Creo que soy yo quien ha cambiado; es la solución más simple. También la más desagradable. Pero debo reconocer que estoy sujeto a estas súbitas transformaciones. Lo que ocurre es que rara vez pienso, entonces, sin darme cuenta, se acumula en mí una multitud de pequeñas metamorfosis, y un buen día se produce una verdadera revolución. Es lo que ha dado a mi vida este aspecto desconcertante, incoherente.“
„Cuando invitamos a Dios a nuestro mundo, él entra. Nos ofrece una multitud de regalos: gozo, paciencia, fortaleza. Las ansiedades llegan, pero no se quedan. Los temores se asoman, pero luego se van. Los pesares aterrizan en el parabrisas, pero luego viene el limpiaparabrisas de la oración. El diablo todavía me presenta rocas de culpa, pero me volteo y se las entrego a Cristo. Estoy“
„Al caer la noche, desde todos los callejones que desembocan en el barranco se derrama una multitud de hombres curiosos y hambrientos que se arremolinan, se precipitan acá y allá sin rumbo, como espermas rabudos en busca del óvulo, y que finalmente son tragados por las fauces abiertas de los burdeles.“
„El crimen cometido por los alemanes es el más abominable que recuerda la historia de las llamadas naciones civilizadas. La conducta de los intelectuales alemanes -como grupo- no fue mejor que la de la multitud. Incluso ahora no hay signo alguno de arrepentimiento o de deseo real de reparar lo que se pueda después de tan gigantescos asesinatos.“
„La multitud obedece más a la necesidad que a la razón, y a los castigos más que al honor.“
„Siempre he creído que una persona es inteligente. Son las multitudes las que son estúpidas. Y pocas cosas confirman esto mejor que la guerra, la religion organizada, la burocracia y la preparatoria, donde la mayoria reina sin piedad. Cuando recordé mis primeros dias ahí, todo lo que ví fue una inseguridade y una duda tan agobiantes que un simple grano era capaz de sacar mi vida de balance. Sólo hasta mis últimos dias tuve confianza y respeto por mi mísmo, incluso un poco de individualid.“
„La multitud, cuando ejerce su autoridad, es más cruel que los tiranos de Oriente.“
„Debemos reservarnos una trastienda del todo nuestra, del todo libre, donde fijar nuestra verdadera libertad y nuestro principal retiro y soledad. En ella debemos mantener nuestra habitual conversación con nosotros mismos, y tan privada que no tenga cabida ninguna relación o comunicación con cosa ajena; discurrir y reír como si no tuviésemos mujer, hijos ni bienes, ni séquito ni criados, para que, cuando llegue la hora de perderlos, no nos resulte nuevo arreglárnoslas sin ellos. Poseemos un alma que puede replegarse en sí misma; puede hacerse compañía, tiene con qué atacar y con qué defender, con qué recibir y con qué dar. No temamos, en esta soledad, pudrirnos en el tedio del ocio: In solis sis tibi turba locis. [En estas soledades, sé una multitud para ti mismo]. La virtud se contenta consigo misma: sin enseñanzas, sin palabras, sin obras.“
„En cuanto al fin que nos proponen Plinio y Cicerón, la gloria, estoy muy lejos de tenerla en cuenta. La inclinación más contraria al retiro es la ambición. La gloria y el reposo no pueden alojarse en el mismo albergue. Por lo que veo, estos sólo tienen los brazos y las piernas fuera de la multitud; su alma y su intención continúan, más que nunca, atadas a ella: b | Tun’ uetule auriculis alienis colligis escas? [Entonces, viejo, ¿trabajas sólo para alimentar los oídos ajenos? ] a | Se han echado atrás solo para saltar mejor, y para, con un movimiento más fuerte, penetrar más vivamente en la muchedumbre. ¿Queréis ver cómo se quedan cortos por un pelo?Comparemos las opiniones de dos filósofos [Epicuro y Séneca], y de dos escuelas muy diferentes, uno escribiendo a Idomeneo, otro a Lucillo, amigos suyos, para apartarlos de la administración de los negocios y de las grandezas, y dirigirlos hacia la soledad. Hasta ahora has vivido —dicen— nadando y flotando; ven a morir al puerto. Has entregado el resto de tu vida a la luz, entrega esta parte a la sombra. Es imposible abandonar las tareas si no renuncias a su fruto; así pues, deshazte de toda preocupación por el nombre y por la gloria. Existe el peligro de que el brillo de tus acciones pasadas te ilumine en exceso, y te siga hasta el interior de tu guarida. Abandona, junto a los demás placeres, el que brinda la aprobación ajena; y, en cuanto a tu ciencia y capacidad, no te importe: no perderán su eficacia porque tú valgas más que ellas. Acuérdate de aquel que, cuando le preguntaron para qué se esforzaba tanto en un arte que no podía ser conocido por mucha gente, respondió: «Me basta con pocos, me basta con uno, me basta con ninguno». Tenía razón. Tú y un compañero sois teatro de sobra suficiente el uno para el otro, o tú para ti mismo. Que el pueblo sea para ti uno solo, y que uno solo sea para ti todo el pueblo. Es una ambición cobarde pretender obtener gloria de la ociosidad y del ocultamiento. Tenemos que hacer como los animales, que borran su rastro a la entrada de su guarida. No has de buscar más que el mundo hable de ti, sino cómo has de hablarte a ti mismo. Retírate en tu interior, pero primero prepárate para acogerte; sería una locura confiarte a ti mismo si no te sabes gobernar. Uno puede equivocarse tanto en la soledad como en la compañía. Hasta que no te hayas vuelto tal que no oses tropezar ante ti, y hasta que no sientas vergüenza y respeto por ti mismo, c | obuersentur species honestae animo [que se ofrezcan imágenes honestas al espíritu], a | represéntate siempre en la imaginación a Catón, Foción y Aristides, ante los cuales aun los locos ocultarían sus faltas, y establécelos como censores de todas tus intenciones. Si estas se desvían, la reverencia por ellos te devolverá al camino. Te retendrán en la vía de contentarte contigo mismo, de no tomar nada en préstamo sino de ti, de detener y fijar el alma en unos pensamientos definidos y limitados donde pueda complacerse; y, tras haber entendido los verdaderos bienes, que se gozan a medida que se entienden, de contentarse con ellos, sin ansias de prolongar la vida ni el nombre. Este es el consejo de la verdadera y genuina filosofía, no de una filosofía ostentosa y verbal, como es la de los dos primeros.“
„¿Qué pasaría…?¿Qué pasaría si un díadespertamos dándonoscuenta de que somos mayoría?¿Qué pasaría si de prontouna injusticia, sólo una,es repudiada por todos,todos los que somos, todos,no unos, no algunos, sino todos?¿Qué pasaría si en vez deseguir divididos nosmultiplicamos, nos sumamosy restamos al enemigo queinterrumpe nuestro paso?¿Qué pasaría si nosorganizáramos y al mismotiempo enfrentáramossin armas, en silencio,en multitudes, en millones demiradas la cara de losopresores, sin vivas,sin aplausos, sin sonrisas,sin palmadas en los hombros,sin cánticos partidistas,sin cánticos?¿Qué pasaría si yo pidiesepor ti que estás tan lejos,y tú por mí que estoy tan lejos, y ambos porlos otros que están muylejos y los otros pornosotros aunque estemos lejos?¿Qué pasaría si el gritode un continente fueseel grito de todos los continentes?¿Qué pasaría si pusiésemosel cuerpo en vez de lamentarnos?¿Qué pasaría si rompemoslas fronteras y avanzamosy avanzamos y avanzamosy avanzamos?¿Qué pasaría si quemamostodas las banderas paratener sólo una, la nuestra,la de todos, o mejorninguna porque nola necesitamos?¿Qué pasaría si de prontodejamos de ser patriotas paraser humanos?No sé… me pregunto yo:¿Qué pasaría…?“
„El deseo de desaparecer, porque las cosas desaparecen, emponzoño tan atrozmente mi sed de ser que, en medio de los resplandores del tiempo, el aliento se apagaba y el ocaso de las naturaleza me envolvía con multitud de sombras. Y como veía el tiempo en todas las cosas, esperaba salvarlas del tiempo.“
„Mientras disfrutamos en nuestras casas de todas las comodidades, no podemos concebir cuán inapreciable es el derecho de gozar libremente del aire y de la luz, que nos es otorgado; nos olvidamos constantemente de la multitud de seres que con o sin culpa sufren humillaciones en inmundos calabozos, privados de este privilegio otorgado por Dios. No pensamos en estas multitudes y no nos sentimos ligados a ellas por ningún lazo. Quisiera ahora estar marcado con el mismo estigma que ellos, no apartarme de ellos, no parecerme a esa gran mayoría de gente exteriormente piadosa, que tiene que acicalarse para pasar por respetable.“
„Mientras meneaba la cola por Joyland Avenue, seguido por multitudes de niños risueños, pensé que no era de extrañar que Wendy me hubiera plantado. Su nuevo novio iba a Dartmouth y jugaba al lacrosse. El anterior pasaba el verano en un parque de atracciones de tercera fila. Donde hacía de perro.“
„Cuando una multitud ejerce la autoridad, es más cruel aún que los tiranos.“
Anteriores
1
2
3
4
Siguientes