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Relacionado con: quiera
„Lo quiero.-¿Cómo puedes decir eso?- Meneó la cabeza-. Ni siquiera conoces el significado de esa palabra. El amor no es avergonzarse de que te vean con la persona a la que quieres. No es castigarlo ni hacerle daño.-Compadeciéndose de la diosa, la soltó-. El amor es lo que te da la fuerza para enfrentarte a cualquier cosa, sin importar lo brutal o aterradora que sea. Es lo que le dio fuerzas a Ash para dejarse dar una paliza en vez de contarle a su padre la verdad sobre vuestra relación. Es lo que le dio fuerzas para dejar que lo destriparan en el suelo a tus pies antes de avergonzarte en público. Y tú le escupiste a la cara por ese amor y lo destrozaste. Para ser una diosa das pena. (Tory)“
„«No quiero vivir sin ti, Julian. ¿Lo entiendes? No puedo vivir sin ti.»“
„Quiero que siempre lleves la cabeza bien alta y que persigas tus sueños, sean cuáles sean. No le hagas caso a la gente que quiera hacerte daño, no permitas que te hagan llorar. Escucha lo que te dice tu corazón para ser mejor que los otros. Nadie consigue nada hiriendo a los demás. La felicidad siempre proviene del interior. Vive tu vida como tú quieras vivirla y así serás feliz. Siempre. Eso es lo más importante, Torimou. (Theron)“
„Si quieres a Sin aunque sea un poco, no lo dejes en la oscuridad. No es justo enseñarle a alguien el sol para sumirlo en la oscuridad más absoluta al poco tiempo. Hasta el diablo puede llorar si echa un vistazo por el infierno y se da cuenta de que está solo. (Aquerón)“
„Duele cuando sabes que no importa cuanto lo intentes, cuanto lo quieras, ellos no pueden amarte o aceptarte como eres.“
„Yo también te quiero, Sunshine. Gracias por tu fuerza y por dejar los productos de soja.“
„Tengo unos deseos horribles de estar dentro de ti, Grace –murmuró–. Quiero sentir tus piernas alrededor de mi cuerpo, sentir tus pechos debajo de mí, escucharte gemir mientras te hago el amor lentamente. Quiero que tu aroma quede impreso en mi cuerpo y que tu aliento me queme la piel.“
„No quiero conocer el futuro si no puedo cambiarlo“
„Quiero que siempre mantengas la cabeza alta y sigas tus sueños a donde te lleven. Ni siquiera escuches a la gente que te lastima o te hace llorar. Escucha a tu corazón y serás mejor que ellos. Nadie consigue salir adelante lastimando a otros. La única paz real que cualquiera puede tener es laúnica que viene sin eso. Vive tu vida en tus propios términos y haz de ella una vida feliz. Siempre. Eso es lo que importa. Nadie puede hacerte sentir inferior sin tu permiso. No se lo permitas. Date cuenta que son sus propias inseguridades las que hacen que te ataquen a ti y a otros. Son tan infelices consigo mismos que la única manera en la que pueden sentirse mejor es haciendo a todo el mundo tan infeliz como lo son ellos.“
„[…] No creo que sea de la incumbencia de mis pacientes si soy o no la reencarnación de la Virgen. Y con respecto a la Era de la Electrónica, no quiero tener una relación con algo que funciona a pilas y viene acompañado de una etiqueta con advertencias.Selena soltó un bufido.—Ya, bueno, pues déjame decirte una cosa: la mayoría de los hombres tendrían que venir acompañados de una etiqueta con advertencias. —Alzó las manos para enmarcar la siguiente afirmación—: «Atención, por favor, Alerta Psicótica. Yo, macho-man, soy propenso a sufrir horribles cambios de humor y a poner caras largas; además, poseo la habilidad de decir la verdad a una mujer sobre su peso sin previo aviso».“
„Su rabia y pérdida, la entiendo perfectamente, y no la culpo en lo más mínimo. No hay peor sensación que tener todo tu mundo destrozado y que no haya nada que puedas hacer para detenerlo. Sentirte en completa y absoluta miseria, y mirar alrededor y ver un mundo que en realidad no da una mierda por ti… eso te golpea a un nivel que agradezco a los dioses no puedas entender o imaginar. Porque nadie debería conocer ese tipo de infierno. Estás perdido en el dolor, gritando a pleno pulmón pidiendo ayuda y nadie te escucha. A nadie le importa. Ellos siguen con sus putrefactas vidas, ajenos a tu agonía. Y cuando llega el momento en que te das cuenta de lo solo que estás… de lo poco que les importas a otras personas, pierdes todo el funcionamiento cognitivo. Te conviertes en un animal rabioso. Todo lo que importa entonces es que les hagas comprender tu dolor. Sacarlos de su ciega autocomplacencia para que compartan ese infierno tuyo. En ese momento, quieres sentir su sangre en las manos. Saborearla en tus labios. Bañarte en ella hasta estar borracho y tener la piel arrugada. Ese es el lugar de locura que vive profundamente dentro de todos. La mayoría de la gente puede tocarlo una, quizás dos veces en su vida, pero jamás llegan a traspasarlo.“
„¿Por qué no?-preguntó Ash a su vez con cara espantada-. Cuando quieres a alguien, cuando lo quieres de verdad, ya sea un amigo o un amante, desnudas tu alma. Le entregas una parte de ti que no le has dado a nadie y le dejas ver una parte de tu persona que solo él o ella puede herir. Prácticamente le das el cuchillo y el mapa con los puntos exactos para que corte en el sitio preciso de tu corazón y de tu alma. Y cuando ataca, te deja lisiado. Te destroza el corazón. Te deja desnudo, expuesto, y te preguntas qué has hecho para provocar tanta rabia cuando lo único que querías era amar a esa persona. Te preguntas qué es lo que haces mal para que nadie confíe en ti, para que nadie te ame. Si pasa una vez, es malo. Pero si se repite… ¿te parece que no es para asustarse?“
„¿Qué ha sido esa vergonzosa exhibición? —me preguntó Wilem cuando Marea se hubo marchado.—¿Cómo dices?—¿Cómo dices? —repitió imitando mi tono de voz—. ¿Cómo te atreves a fingir siquiera que eres tan imbécil? Si una chica tan guapa como esa me mirara con un solo ojo de la forma en que te ha mirado a ti con los dos… Ya habríamos encontrado una habitación, por expresarlo de forma educada.—Ha sido simpática —protesté—. Y hemos hablado un rato. Me ha preguntado si querría enseñarle algunos acordes de arpa, pero hace mucho tiempo que no toco el arpa.—Pues si sigues pasando por alto insinuaciones como esa, seguirás sin tocarla mucho tiempo —repuso Wilem con franqueza—. Lo único que ha faltado ha sido que se desabrochara otro botón.Sim se inclinó hacia mí y apoyó una mano en mi hombro; era la viva imagen del amigo preocupado.—Kvothe, hace tiempo que quiero hablar contigo de este problema. Si de verdad no te has dado cuenta de que esa chica se interesaba por ti, quizá tengas que admitir la posibilidad de que seas absolutamente inepto en lo relativo a las mujeres. Quizá debas plantearte el sacerdocio.—Estáis borrachos —dije para disimular mi rubor—. ¿Os habéis quedado con que es la hija de un concejal?—¿Te has quedado —replicó Wil en el mismo tono— con cómo te miraba?Yo sabía que era deplorablemente inexperto con las mujeres, pero no tenía por qué reconocerlo. Así que descarté sus comentarios con un ademán y bajé del taburete.—No sé, pero dudo que un revolcón detrás de la barra fuera en lo que estaba pensando esa chica. —Bebí un sorbo de agua y me alisé la capa—. Bueno, tengo que encontrar a mi Aloine y darle las gracias. ¿Qué aspecto tengo?—¿Qué más da? —dijo Wilem.Simmon le tocó el codo a Wilem.—¿No lo ves? Va detrás de una presa más peligrosa que la escotada hija de un concejal.“
„«Cada uno se come una parte. diferente del cerdo —me había dicho—. Si quieres que te. acepten, haz lo mismo.» En diferentes lugares, diferentes decoros.“
„¿Qué asignaturas has elegido? —me preguntó Manet mientras Wil y él cerraban el trato con un apretón de manos.La pregunta me pilló desprevenido.—Todas, supongo.—Hablas como yo hace treinta años —dijo Manet riendo—. ¿Por dónde vas a empezar?—Por los Chandrian —contesté—. Quiero saber todo lo que pueda sobre los Chandrian.Manet frunció el ceño, y luego soltó una carcajada.—Bueno, supongo que no debería extrañarme. Sim estudia a las hadas y a los duendes. Wil cree en todo tipo de absurdos espíritus celestes ceáldicos. —Infló el pecho—. A mí me encantan los diablillos y los engendros.Noté que me ruborizaba de vergüenza.—Por el cuerpo de Dios, Manet —le cortó Sim—. ¿Se puede saber qué mosca te ha picado?—Acabo de apostar dos iotas por un chico que quiere estudiar cuentos infantiles —refunfuñó Manet apuntándome con el tenedor.“
„Dado que Imre era un refugio para la música y el teatro, quizá penséis que yo pasaba mucho tiempo allí, pero nada podría estar más lejos de la verdad. Solo había estado en Imre una vez. Wilem y Simmon me habían llevado a una posada donde tocaba un trío de hábiles músicos: laúd, flauta y tambor. Pedí una jarra de cerveza pequeña que me costó medio penique y me relajé, dispuesto a disfrutar de una velada con mis amigos…Pero no pude. Apenas unos minutos después de que empezara a sonar la música, casi salí corriendo del local. Dudo mucho que podáis entender por qué, pero supongo que si quiero que esto tenga algún sentido, tendré que explicároslo.No soportaba oír música y no formar parte de ella. Era como ver a la mujer que amas acostándose con otro hombre. No. No es eso. Era como…Era como los consumidores de resina que había visto en Tarbean. La resina de denner era ilegal, por supuesto, pero había partes de la ciudad en que eso no importaba. La resina se vendía envuelta en papel encerado, como los pirulís o los tofes. Mascarla te llenaba de euforia. De felicidad. De satisfacción.Pero pasadas unas horas estabas temblando, dominado por una desesperada necesidad de consumir más, y esa ansia empeoraba cuanto más tiempo llevabas consumiéndola. Una vez, en Tarbean, vi a una joven de no más de dieciséis años con los reveladores ojos hundidos y los dientes exageradamente blancos de los adictos perdidos. Le estaba pidiendo un «caramelo» de resina a un marinero, que lo sostenía fuera de su alcance, burlándose de ella. Le decía a la chica que se lo daría si se desnudaba y bailaba para él allí mismo, en medio de la calle.La chica lo hizo, sin importarle quién pudiera estar mirando, sin importarle que fuera casi el Solsticio de Invierno y que en la calle hubiera diez centímetros de nieve. Se quitó la ropa y bailó desenfrenadamente; le temblaban las pálidas extremidades, y sus movimientos eran patéticos y espasmódicos. Entonces, cuando el marinero rio y negó con la cabeza, ella cayó de rodillas en la nieve, suplicando y sollozando, agarrándose desesperadamente a las piernas del marinero, prometiéndole que haría cualquier cosa que le pidiera, cualquier cosa…Así era como me sentía yo cuando oía tocar a unos músicos. No podía soportarlo. La ausencia diaria de mi música era como un dolor de muelas al que me había acostumbrado. Podía vivir con ello. Pero no soportaba ver cómo agitaban delante de mí el objeto de mi deseo.“
„Cuando quieres algo, tienes que asegurarte de que eso te quiere a ti, porque si no, pasarás muchos apuros persiguiéndolo.“
„El hábito no hace al monje, pero si quieres interpretar un papel, necesitas el disfraz adecuado.“
„Estoy harta de que solo me valoren por mi intelecto.-Se recostó en la silla y estiró los brazos por encima de la cabeza-. ¿Cuándo encontraré a un chico guapo que solo me quiera por mi cuerpo?“
„Estuviera donde estuviese, siempre era el centro de todas las miradas, -Kvothe frunció el seño-. No me interpretéis mal. No quiero decir que fuera llamativa, ni vanidosa. Si miramos el fuego es porque parpadea, porque resplandece. Lo que hace que un hombre se acerque al fuego no tiene nada que ver con su resplandor. Lo que te atrae del fuego es el calor que sientes cuando te acercas a él. Con Denna pasaba lo mismo.“
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