Juegos
Todos los emojis
Citas
Blog
Página de inicio
»
término
»
Página 6
Relacionado con: término
„El tirano muere y su reino termina; el mártir muere y su reino comienza.“
„la realidad, aunque rebelde, termina por parecerse a nuestros sueños, si éstos se sueñan con la suficiente perseverancia.“
„Los que se han encontrado con el señor Hitler cara a cara en asuntos públicos o en términos sociales han podido apreciar que se trata de un político altamente competente, ponderado, bien informado, de modales agradables y una desarmante sonrisa.“
„Le dio al término “completo” un nuevo significado. Hizo que la palabra “superestrella” fuera inadecuada. Tenía un toque de realeza”.“
„Quien considere, en términos posmodernos, que todo es ideología, deberá demostrar con claridad cuál es la ideología de conceptos como Endecasílabo, Cronotopo o Renacimiento, por ejemplo.“
„Una delimitación física de la naturaleza termina en el punto donde comienza la esfera del intelecto, y se abre un nuevo mundo mental a nuestra vista. Marca el límite, pero no lo supera.“
„A veces al hablar de mi vida, termino por romper a llorar, supongo que es así como empiezo a contar lo que quiero decir de verdad“
„Los priístas usan un lenguaje revolucionario, emplean términos muy avanzados, y sin embargo un campesino, sin palabras, sin lenguaje, con su sola actitud, esmás revolucionario que todos nosotros juntos.Pablo Gómez, estudiante de la Escuela de Economía de la UNAM y de las Juventudes Comunistas.“
„Amar significaba tiranizar y dominar… El amor es una lucha que empieza con odio y termina con el sometimiento del objeto amado.“
„La primera conversación telefónica, la que hizo Pelletier, empezó de manera difícil, aunque Espinoza esperaba esa llamada, como si a ambos les costara decirse lo que tarde o temprano iban a tener que decirse. Los veinte minutos iniciales tuvieron un tono trágico en donde la palabra destino se empleó diez veces y la palabra amistad veinticuatro. El nombre de Liz Norton se pronunció cincuenta veces, nueve de ellas en vano. La palabra París se dijo en siete ocasiones. Madrid, en ocho. La palabra amor se pronunció dos veces, una cada uno. La palabra horror se pronunció en seis ocasiones y la palabra felicidad en una (la empleó Espinoza). La palabra resolución se dijo en doce ocasiones. La palabra solipsismo en siete. La palabra eufemismo en diez. La palabra categoría, en singular y en plural, en nueve. La palabra estructuralismo en una (Pelletier). El término literatura norteamericana en tres. Las palabras cena y cenamos y desayuno y sándwich en diecinueve. La palabra ojos y manos y cabellera en catorce.“
„No sé si se entenderá el término caer por su propio peso; imaginen una estatua hecha de mierda que se hunde lentamente en el desierto: bueno, eso es caer por su propio peso.“
„Uno nunca termina de leer, aunque los libros se acaben, de la misma manera que uno nunca termina de vivir, aunque la muerte sea un hecho cierto.“
„La civilización termina donde comienza la carne asada.“
„Un libro, como un viaje, se comienza con inquietud y se termina con melancolía.“
„Donde termina la civilización y comienza la Cultura de la Carne Asada.» Al Referirse al Norte de México“
„Cuando salí de prisión —pues alguien interfirió y pagó al impuesto— no observé que se hubieran producido grandes cambios en los colectivo, en lo comunitario, como fue el caso de quien, entrado de joven, salió hecho un viejo chocho de pelos grises; sin embargo, a mi modo de ver una modificación sí había tenido lugar en la escena —la villa, el estado y el país— y mayor aún que cualquiera que pudiera deberse al mero paso del tiempo. El Estado en que vivía se me ofreció con perfiles más definidos. Vi hasta qué punto podían ser tenidos como buenos los vecinos y amigos que me rodeaban; reparé en que su amistad era apta sólo para climas estivales; que no abrigaban deseos de llevar a término especialmente justo; que por sus prejuicios y supersticiones constituían una raza tan distinta de mí como lo sería un chino o un malayo; que con sus sacrificios en aras de la humanidad no incurrían en riesgos, ni siquiera en aquél que pudiere afectar tan sólo a sus bienes; que, después de todo, no eran tan nobles, sino que trataban al ladrón como les había tratado a ellos; y que mediante cierta apariencia externa y una cuantas plegarias, así como discurriendo de vez en cuando por una vía recta, pero inútil, esperaban salvar sus almas. Puede que esto parezca un juicio severo sobre mis conciudadanos, pues, según creo, muchos de ellos no saben siquiera que poseen una institución tal como la de la cárcel de su comunidad.“
„Algunos afirman que ya no puede hablarse de izquierda ni derecha y que sólo cabe un pragmatismo político universal. Sin embargo, esos términos que han orientado a tantos durante un par de siglos se resisten a ser enterrados; ya no son dogmas ni banderas, pero pueden seguir determinando ideales de acción política.“
„Supongo que cualquiera que se denomine liberal en un sentido no estrictamente predatorio del término debería suscribir este elemental punto de vista pero en España vivimos de sorpresa en sorpresa. En Norteamérica, el tema de la familia es el principal campo de batalla entre los dos grandes partidos. Es decir, la familia de modelo tradicional, centrada en la autoridad del páter familias, frente a la familia asistencial del cuidado mutuo y la complementariedad en acelerada transformación social. Lo que ocurre es que en EEUU son liberales los no conservadores y conservadores los no liberales, mientras que en España lo que más abundan son los liberales en conserva. Y así la confusión sigue aumentando…“
„A veces el Estado, con el pretexto de ayudar a los inválidos, termina por tratarlos como si fuesen inválidos.“
„¿Sabes cuál es la única obligación que tenemos en esta vida?Pues no ser imbéciles. La palabra «imbécil» es más sustanciosa de lo que parece, no te vayas a creer. Viene del latín baculus quesignifica «bastón»: el imbécil es el que necesita bastón paracaminar. Que no se enfaden con nosotros los cojos ni losancianitos, porque el bastón al que nos referimos no es el que seusa muy legítimamente para ayudar a sostenerse y dar pasitos a un cuerpo quebrantado por algún accidente o por la edad. El imbécil puede ser todo lo ágil que se quiera y dar brincos como una gacela olímpica, no se trata de eso. Si el imbécil cojea no es de los pies, sino del ánimo: es su espíritu el debilucho y cojitranco, aunque su cuerpo pegue unas volteretas de órdago. Hay imbéciles de varios modelos, a elegir:a) El que cree que no quiere nada, elque dice que todo le da igual,el que vive en un perpetuo bostezo o en siesta permanente, aunque tenga los ojos abiertos y no ronque.b) El que cree que lo quiere todo, lo primero que se le presenta ylo contrario de lo que se le presenta: marcharse y quedarse, bailar y estar sentado, masticar ajos y dar besos sublimes, todo a la vez.c) El que no sabe lo que quiere ni se molesta en averiguarlo.Imita los quereres de sus vecinos o les lleva la contraria porque sí,todo lo que hace está dictado por la opinión mayoritaria de los quele rodean: es conformista sin reflexión o rebelde sin causa.d) El que sabe que quiere y sabe lo que quiere y, más o menos,sabe por qué lo quiere pero lo quiere flojito, con miedo o con pocafuerza. A fin de cuentas, termina siempre haciendo lo que no quiere y dejando lo que quiere para mañana, a ver si entonces seencuentra más entonado.e) El que quiere con fuerza y ferocidad, en plan bárbaro, pero seha engañado a sí mismo sobre lo que es la realidad, se despistaenormemente y termina confundiendo la buena vida con aquelloque va a hacerle polvo.Todos estos tipos de imbecilidad necesitan bastón, es decir, necesitan apoyarse en cosas de fuera, ajenas, que no tienen nada que ver con la libertad y la reflexión propias. Siento decirte que losimbéciles suelen acabar bastante mal, crea lo que crea la opiniónvulgar. Cuando digo que «acaban mal» no me refiero a queterminen en la cárcel o fulminados por un rayo (eso sólo suele pasar en las películas), sino que te aviso de que suelen fastidiarse a sí mismos y nunca logran vivir la buena vida esa que tanto nosapetece a ti y a mí. Y todavía siento más tener que informarte quésíntomas de imbecilidad solemos tener casi todos; vamos, por lomenos yo me los encuentro un día sí y otro también, ojalá a ti tevaya mejor en el invento…Conclusión: ¡alerta!, ¡en guardia!, ¡laimbecilidad acecha y no perdona!“
Anteriores
1
…
5
6
7
…
12
Siguientes