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Relacionado con: tormenta
„Como la tormenta no podía soplar en todas partes a la vez, siempre había algún rincón donde quedaban unas hojas, un rincón donde brillaba el sol y donde temporalmente había un refugio de paz. La historia de la Guerra de China, como la historia de todos los grandes movimientos, está escrita en las mentes y los corazones de su generación. Dentro de cincuenta o cien años, en las charlas caseras y los relatos de las viejas, se contarán las historias de miles de esas hojas barridas por la tormenta. Cada hoja en la tormenta es un individuo con un corazón y sentimientos y aspiraciones y deseos.“
„Parece que va siendo evidente que la distopía que nos corresponde no es 1984, de Orwell, sino Un mundo feliz, de Aldous Huxley, en el que hay consenso para que desaparezca por nocivo y peligroso el “amor romántico”, ese pleonasmo (como el agua húmeda). Sin amor sólo quedará el sexo como placer y fiesta, una especie de amor sin espinas, como los filetes de pescado congelado. Punto final a esa manía alucinatoria de buscar nuestra otra mitad, el cariño absoluto que da sentido a la vida o compensa de no encontrarlo, los celos y recelos, las cóleras y reconciliaciones, la pérdida, la fatiga asombrosa de querer. “Si duele no es amor”, han decretado los coachs(esos psicólogos para quienes no tienen ya psique). Así podemos despachar el estorbo de casi toda la literatura occidental, basada en que solo es amor si duele. Y sus contradicciones: el poeta que se queja de la espina en el corazón clavada y cuando se la quitan protesta porque ya no siente el corazón… ¡Bah, no tienen pensamiento positivo, no saben pasarlo bien! Así les va a las pobres chicas, Emma, Ana, Desdémona… el último beso de Otelo. ¡Otelo! ¡Cómo no le da vergüenza a Shakespeare ser tan romántico al hablar de la violencia de género! Necesitamos menos poetas y más pilates: hay que decírselo a los adolescentes enseguida, para que no se amarguen la vida.Olvidemos el bárbaro pasado y sus neuróticos arrebatos. Adiós a morbosas torturas como las que describe T. S. Eliot (trad. Andreu Jaume): “¿Quién concibió pues el tormento? El Amor. / El Amor es el nombre más siniestro / escondido en las manos que bordaron / la insoportable camisa de fuego / que las fuerzas humanas no quitaron. / Tan solo suspiramos, tan solo vivimos / por fuego y por el fuego consumidos”.“
„«Cuando acabe la tormenta, mi bosque estará desolado“
„Me gustaría estar en esta tormenta pero no confío en el vaso.“
„Un estómago cargado, (…) avaricioso, engendra malos pensamientos, avinagra el carácter, fomenta complejos y apetitos sexuales chuecos y crea vocación de delito, una necesidad de castigar en los otros el tormento excrementicio“
„Las tormentas hacen que los árboles echen raíces más profundas.“
„FocaEl nudo de la zoologiaes esta foca funcionalque vive en un saco de gomao en la luz negra de su piel.Circulan adentro de ellalos movimientos inherentesa la monarquia del mary se ve a este ser encerradoen la gimnasia del tormentodescubrir el mundo rodandopor las escaleras de hielohasta mirarnos con los ojosmas penetrantes del planeta.“
„Esto ha sido como un paseo Supongo que he tenido que pasar por allí para llegar hasta aquí Puede que alguno de ustedes aun estén allí Pero si quieres intentar salir, sólo sígueme Voy a llevarte No tengo miedo Que todo el mundo, agarre mi mano Caminemos juntos a través de la tormenta Sea cual sea el clima, haga frío o calor Solo quiero que sepas que no estas solo Grita si sientes que has pasado por el mismo camino que yo.“
„Después de la tormenta, viene la lluvia“
„Funes discernía continuamente los tranquilos avances de la corrupción, de las caries, de la fatiga. Notaba los progresos de la muerte, de la humedad. Era el solitario y lúcido espectador de un mundo multiforme, instantáneo y casi intolerablemente preciso. Babilonia, Londres y Nueva York han abrumado con feroz esplendor la imaginación de los hombres; nadie, en sus torres populosas o en sus avenidas urgentes, ha sentido el calor y la presión de una realidad tan infatigable como la que día y noche convergía sobre el infeliz Ireneo, en su pobre arrabal sudamericano. Le era muy difícil dormir. Dormir es distraerse del mundo; Funes, de espaldas en el catre, en la sombra, se figuraba cada grieta y cada moldura de las casas precisas que lo rodeaban. (Repito que el menos importante de sus recuerdos era más minucioso y más vivo que nuestra percepción de un goce físico o de un tormento físico.) Hacia el Este, en un trecho no amanzanado, había casas nuevas, desconocidas. Funes las imaginaba negras, compactas, hechas de tiniebla homogénea; en esa dirección volvía la cara para dormir. También solía imaginarse en el fondo del río, mecido y anulado por la corriente.“
„Pero aquella tarde se preguntó con su infinita capacidad de ilusión si una indiferencia tan encarnizada no sería un subterfugio para disimular un tormento de amor. La“
„Cuando terminó, Cayetano tomó la mano de Sierva María y la puso sobre su corazón. Ella sintió dentro el fragor de su tormenta. «Siempre estoy así», dijo él.“
„Las nubes vienen flotando a mi vida como otros días, no para arrojar lluvia o para dar paso a la tormenta, sino para dar color a mi atardecer.“
„La razón sólo nos sirve para disecar la realidad en calma, o analizar sus futuras tormentas, nunca para resolver una crisis momentánea“
„No se trata de encontrar refugio en una tormenta. Se trata de aprender a bailar bajo la lluvia.“
„«—Denna es una criatura salvaje—expliqué—. Como una cierva o una tormenta de verano. Si una tormenta derribara tu casa, o derribara un árbol, no dirías que la tormenta era mala. Era cruel. Actuó conforme a su naturaleza y, desgraciadamente, produjo daños. Con Denna pasa lo mismo.»“
„[…] Lorren irrumpió en el vestíbulo. Su semblante, normalmente plácido, reflejaba dureza y ferocidad. Me entró un sudor frío y pensé en lo que Teccam escribió en su Teofanía: «Todos los hombres sabios temen tres cosas: la tormenta en el mar, la noche sin luna y la ira de un hombre apacible».“
„No se trata de ser o no culpable —razonó Manet—. Un árbol no provoca una tormenta, pero cualquier idiota sabe dónde va a caer el rayo.Wilem asintió con gesto grave.—En mi tierra decimos: el clavo más alto es el que primero recibe el martillazo. —Arrugó el entrecejo—. En siaru suena mejor.“
„Su voz es como una tormenta, y sus manos conocen todos los secretos ocultos bajo la fría y oscura tierra.“
„Todo hombre sabio teme tres cosas: una tormenta en el mar, las noches sin luna y la ira un hombre amable“
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