„… la música que se pasea por la piel, se incorpora a la sangre y a la respiración, y después basta, nada de razones profundas.“
— Julio Cortázar
„Al oír tamañas blasfemias, la Bernarda se santiguaba por quintuplicado. Más tarde, por la noche, decía una oración extra por el alma poluta del señor Barceló, que tenía buen corazón, pero a quien de tanto leer se le habían podrido los sesos, como a don Quijote.“
— Carlos Ruiz Zafón
„la veía transfigurada en la reverberación de las dos de la tarde bajo la llovizna de azahares de los almendros, donde siempre era abril en cualquier tiempo del año.“
— Gabriel García Márquez
„Quisiera ver claro en mí antes de que sea demasiado tarde.“
— Jean Paul Sartre
„Es la incertidumbre lo que le encanta a uno, todo se hace maravilloso en la bruma.“
— Fiódor Dostoyevski
„No necesito que haya nada entre tú y yo: la piel. No necesito nada de tu corazón: beber.“
— Roberto Iniesta
„¡Maldición, maldición, maldición!. Lo que daría por tenerte aquí.“
— Avril Lavigne
„Vence el miedo y la ira que hay en ti. Deja entrar dentro de ti una luz clara que vaya fundiendo el hielo de tu corazón. Eso es volverse fuerte de verdad.“
— Haruki Murakami
„«la visión sólo llega a ser clara cuando uno puede mirarse el corazón. El que mira hacia afuera, sueña; el que mira hacia dentro, despierta».“
— Robin S. Sharma
„Como la tarde que te perdiste y encontraste el corazón“
— Alejandro Sanz
„Un te quiero, un hasta luego y un por qué, una suerte que me ampara porque yo me la busqué.“
— Nach
„Me acuesto de día, cuando llega la luz. Y tengo claro que no quiero ser como tú.“
— Roberto Iniesta
„Qué pequeña es la luz de los faros de quien sueña con la libertad.“
— Joaquín Sabina