Página de inicio » Quote » Carlos Ruiz Zafón » „Incluso ella comprendía que no bastaba con aquello, que cada minuto que Penélope y Julián pasaban juntos les unía más. Hace tiempo que el aya había aprendido a reconocer en sus miradas el desafío y la arrogancia del deseo: una voluntad ciega de ser descubiertos, de que su secreto fuera un escándalo a voces y ya no tuvieran que ocultarse en rincones y desvanes para amarse a tientas. A veces, cuando Jacinta acudía a arropar a Penélope, la muchacha se deshacía en lagrimas y le confesaba sus deseos de huir con Julián, de tomar el primer tren y escapar a donde nadie les conociese.“
„Incluso ella comprendía que no bastaba con aquello, que cada minuto que Penélope y Julián pasaban juntos les unía más. Hace tiempo que el aya había aprendido a reconocer en sus miradas el desafío y la arrogancia del deseo: una voluntad ciega de ser descubiertos, de que su secreto fuera un escándalo a voces y ya no tuvieran que ocultarse en rincones y desvanes para amarse a tientas. A veces, cuando Jacinta acudía a arropar a Penélope, la muchacha se deshacía en lagrimas y le confesaba sus deseos de huir con Julián, de tomar el primer tren y escapar a donde nadie les conociese.“