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„Cuando Lila me refirió aquello, dijo también que lo que ella llamaba desbordamiento, pese a habérsele manifestado de forma clara únicamente en esa ocasión, no le resultaba del todo nuevo. Por ejemplo, a menudo había tenido la sensación de instalarse por unas pocas fracciones de segundo en una persona, una cosa, un número o una sílaba, violando sus contornos. Y el día en que su padre la había lanzado por la ventana, mientras volaba en dirección al asfalto, había tenido la certeza absoluta de que unos animalitos rojizos, muy amistosos, se dedicaban a disolver la composición de la calle para transformarla en una materia lisa y blanda. Pero aquella noche de año nuevo fue la primera vez en que notó que unos entes desconocidos rompían el perfil del mundo para revelar su naturaleza espantosa. Aquello la había conmocionado.“
„Les pido a todos, a todo el pueblo, que por lo menos dejen una ventana abierta para que Cristo entre en sus vidas.“
„Nadie se desembaraza de un hábito o de un vicio tirándolo de una vez por la ventana; hay que sacarlo por la escalera, peldaño a peldaño.“
„Las ruinas son, a menudo, las que abren las ventanas para ver el cielo.»“
„Cómo soportaba él los ojos de la muchacha y revolvía los suyos contra la cabeza juvenil, escapando de allí para escarbar en la tormenta de la noche, para adherir a su mirada la intensidad del cielo y derramarla, imponerla en aquel rostro de niña que lo observaba inmóvil y sin expresión, dejando perder sin quererlo, sin saber, sin poder evitarlo, entregando a su cara seria y fatigada de hombre la dulzura y la humildad adolescente de las mejillas pecosas y del cuello, desde el paisaje ennegrecido del jardín, atrás de la ventana.“
„Las heridas quemaban como solesa las cinco de la tarde,y el gentío rompía las ventanasa las cinco de la tarde.A las cinco de la tarde.¡Ay qué terribles cinco de la tarde!¡Eran las cinco en todos los relojes!¡Eran las cinco en sombra de la tarde!“
„Mi vecino nunca le dice palabras de amor a la mujer; entra a la casa por la ventana y no por la puerta; por una puerta se entra a muchos sitios, al trabajo, al cuartel, a la cárcel, a todos los edificios, pero no al mundo, ni a una mujer, ni al alma; es decir, a ese cajón o nave o lluvia que llamamos así; como hoy, que llueve mucho y me cuesta escribir la palabra amor; porque el amor es una cosa y la palabra amor es otra, y sólo el alma sabe dónde las dos se encuentran.“
„Me gusta el sol, Aliciay las palomas, el buen cigarroy la guitarra española,saltar paredes y abrir las ventanasy cuando llora una mujer.Me gusta el vino tanto como las floresy los conejos pero no los tractores,el pan casero y la voz de Doloresy el mar mojándome los pies,no soy de aqui ni soy de alláno tengo edad mi porvenir y ser felízes mi color de identidad.“
„Una casa tan antigua como ésta, se convierte, con el tiempo, en un ser vivo. Puede que tenga vigas en vez de huesos, ventanas en vez de ojos, y que ahí sentada, sola, pueda terminar enloqueciendo. Dentro de su paredes, comienza a aferrarse a las cosas, a mantenerlas vivas pese a que no deberían estarlo. Cosas como recuerdos, sentimientos, personas —hizo una pausa y continuó—. Algunas son buenas, otras malas… y otras… otras no deberían mencionarse nunca más.“
„Irremediablemente, él nota el regusto de melancolía. De pronto los recuerdos acuden atropellándose: palabras breves como gemidos deslizándose por una piel desnuda, escorzo de líneas largas y suaves reflejadas sobre un espejo que multiplicaba el gris de afuera, en el contraluz plomizo de una ventana que, como un cuadro francés de primeros de siglo, enmarcaba palmeras mojadas, mar y lluvia.“
„Napoleón nos hizo polvo. En España había un movimiento al que se llamaba «afrancesado» y que reunía a gente como Moratín y Goya, culta, con ideas renovadoras, y la invasión provocó su aplastamiento. Hay que decirlo: buena parte de la culpa la tuvimos los españoles, porque no se trata sólo de que llegara un rey malo que arrasó las libertades alcanzadas en la Constitución de 1812; sino de que los españoles también las tiramos por la ventana. Éste era un país tan miserable, tan cobarde, tan inculto, que cuando recibió una constitución avanzadísima, concebida en el papel por gente de bien y que le daba libertad, en vez de levantarse en su apoyo, se une al carro del despotismo y secunda a Fernando VII en la persecución del espíritu liberal. […] Hay una excusa y es que la gente era analfabeta. Nadie le había enseñado a pensar, estaba en manos de curas fanáticos, de reyes incapaces y de ministros corruptos. Igual se apuñalaba franceses que liberales y luego ibas a misa y te absolvían. Pero ya no es así, la educación es universal y gratuita, existe internet, hay libros de bolsillo, el que quiera puede acceder a la cultura. Hoy es inculto el que quiere. El campesino que pegaba fuego a la iglesia de su pueblo y mataba al cacique en el año 36 quizá tenía una explicación histórica. Ya no; el que hace caso omiso al progreso y la solidaridad es por cobardía, por apoltronamiento y por bajeza moral. Cuando gritamos «¡Vivan las cadenas!» es porque queremos tenerlas. En España nos sigue dando miedo la libertad responsable, aunque la otra nos encanta… Poder mearnos en la esquina nos pone.“
„Todo el mundo -incluso los japoneses y, si me apuran, los norteamericanos- tiene derecho a viajar y a la cultura, suponiendo que viajar pueda todavía considerarse cultura. […] Mas convendrán conmigo en que asomarse a una ventana del hotel Daniel de Venecia y encontrar los canales literalmente atestados por miles de japoneses en góndola, o vivir en el Crillón de París rodeado de fulanos de Arkansas que hablan por la nariz, llevan gorras de béisbol y preguntan dónde está la fontana de Trevi, le quita el encanto a cualquier cosa“
„Hay una cosa que no le perdono ni a la derecha ni a la izquierda. Que la izquierda haya dejado la idea de España como patrimonio exclusivo de la derecha y que ésta haya abusado de ello. Cierto, el franquismo contaminó la historia de España: le puso camisa azul al Cid, a los almogávares y a los Tercios de Flandes; pero cuando cambia el régimen, en vez de purgar la memoria de esa contaminación, lo que se hace es decir «cómo está contaminada», y entonces se la tira por la ventana, se barrena, se aplasta, se aniquila; con todo lo cual nos dejan indefensos. Y entonces, ¿qué pasa? Palabras contaminadas por el franquismo, como España, se dejan en manos de la derecha y a partir de ahí, todo lo que tiene que ver con patria, con bandera, con historia, con tradición en su sentido más noble, nos suena a derecha, y claro, es malo y sospechoso… Han conseguido que sea «sospechoso» todo lo que tiene que ver con nuestra memoria. Y en eso, insisto, han sido tan culpables el PP como el PSOE. Entre todos nos han desmantelado. Que alguien diga que la palabra España es franquista cuando «Hispania» nombraba a la provincia romana es ridículo.“
„España se mete en el siglo XVI en una empresa imposible de resolver. Hay dos factores que lo impiden. Por una parte, es demasiado imperio para una monarquía no descentralizada. Desde el Escorial no se puede gobernar todo el imperio, no existe Internet, no existe el teléfono, no existe el telegrama. Y es imposible, por mucha voluntad que se le eche. Por otra parte, el sistema español es absolutamente imperfecto, basado en una política no realista, y la Religión nos machaca. Cuando Felipe II dice que no está dispuesto a ser rey de herejes, ahí está firmando la sentencia de muerte del Imperio. Siempre digo que en Trento nos equivocamos de Dios, apostamos por un Dios reaccionario. El Dios moderno era el del Norte, el luterano, el que permitía negocios, con una burguesía que comerciaba, leía, viajaba, con ventanas abiertas al futuro. En vez de apostar por ese Dios moderno, el que con el tiempo se ha demostrado que tenía posibilidades de futuro, lo hicimos por el oscuro, el reaccionario, el de los prejuicios, las hogueras, el de los confesores diciendo al Rey a quién había que quemar. La Monarquía no tenía los elementos ni morales ni materiales para hacer frente al desafío de mantener ese imperio.“
„Es octubre, un día húmedo. Desde la ventana del hotel veo demasiadas cosas de esta ciudad del Medio Oeste. Veo cómo se encienden las luces de algunos edificios, veo cómo el humo de las altas chimeneas se alza en columnas espesas. Me gustaría no tener que mirar.“
„Pues en cuanto consideramos la existencia de cada individuo como una habitación mayor o menor, queda de manifiesto que los más sólo llegan a conocer apenas un rincón de su aposento. Un sitio junto a la ventana. O bien alguna estrecha faja del entarimado, que van y vienen recorriendo de un lado para otro. Así disfrutan de alguna seguridad…“
„He aquí algunos bichos musicales que desearíamos que sus madres hubiesen tenido seguros médicos que incluyeran abortos. Estos cantantes que piensan que son tan especiales que solo necesitan un nombre. Bono, Sting, Jewel, Tiffany, Prince… que montón de mierda, tengan un puto apellido, quieren, por favor, tengo para ustedes un nombre de dos palabras: Pretencioso Chupavergas. ¿Qué les parece? Bono, Sting… No es suficiente con que la música apeste, pero sin apellido, uno no puede salir a buscar sus casas para lanzarles una bomba por la ventana.“
„Sólo cerrando las puerta detrás de uno se abren ventanas hacia el porvenir.“
„Cambiaría el más bello atardecer del mundo por una sola vista de la silueta de Nueva York. Particularmente cuando no se pueden ver los detalles. Sólo las formas. Las formas y el pensamiento que las hizo. El cielo de Nueva York y la voluntad del hombre hecha visible ¿Qué otra religión necesitamos? Y entonces la gente me habla de peregrinaciones a algún agujero infecto en una jungla, a donde van a homenajear a un templo en ruinas, a un monstruo de piedra con barriga, creado por algún salvaje leproso ¿Es genio y belleza lo que quieren ver? ¿Buscan un sentido de lo sublime? Dejadles que vengan a Nueva York, que vengan a la orilla del Hudson, miren y se pongan de rodillas. Cuando veo la ciudad desde mi ventana -no, no siento lo pequeña que soy- sino que siento que si una guerra viniese amenazar esto, me arrojaría a mí misma al espacio, sobre la ciudad, y protegería estos edificios con mi cuerpo.“
„Mañana…tal vez las armas no serán más que palabras. Las palabras más abundantes, las más rápidas o las últimas. Mire por la ventana. Dígame qué ve.“
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